Acriton. “Los propios juzgados incumplen la formalización de documentos”.
Y, tristemente, así sucederá mientras lo permitan los afectados, que no suelen acudir a las vías existentes para corregir semejantes incumplimientos. Lo peor es que conduce a la “pescadilla que se muerde la cola”, añadiendo más actuaciones a los ya dilatados procesos principales.