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Falsas denuncias
Hace un año que no sé de mis hijos. Bastó una denuncia por amenazas e injurias por telepatía para que me quitasen hasta la patria potestad. Se celebró el juicio por telépata perverso y fui condenado sin que se me permitiese hablar, preguntar, presentar prueba... defenderme. Apelé y la Audiencia me dió la razón decretando la nulidad y la repetición del juicio. Recusé a la jueza de videntes y me aceptaron la recusación. El lunes se repitió el juicio y los denunciantes (mi ex y su hermano) ni aparecieron. Tanto la fiscal como la nueva jueza han solicitado mi absolución "por no comparecer los denunciantes". No me hizo falta el perito que pensaba llevar (la bruja Lola, Rappel, Acebes, ...)
A la fiscal le pregunté el porqué me condenó entonces y me absuelve ahora pues los elementos de juicio han sido los mismos, NINGUNO, pues en el primer juicio no nos admitieron prueba alguna a ninguna de las partes. En el segundo juicio ella como fiscal ha de perseguir el delito aún no estando presentes los denunciantes (supuestos perjudicados/ofendidos). Se calló la muy...
A la jueza sustituta le pregunté quién me iba a devolver el tiempo perdido, mis hijos, honor, dignidad, salud, economía, etc.
Le pedí a la jueza licencia para querellarme por calumnias e injurias (CP 215) y no me contestó. Le pedí que actuase de oficio por denuncia falsa (CP 456) y no me contestó....
Mientras mis hijos siguen en manos de quien ni les da de comer (pérdidas de peso cercanas al 30%) a pesar de ser su madre (aunque nunca ha ejercido de tal), de quien les cambia cada año de colegio, de quien les sacude si me cuentan cosas, de quien les tiene encerrados todo el día en casa, de quien les tiene enfermos de continuo y ni les lleva al médico ni les compra las medicinas, .... yo sigo inscrito en el registro de maltratadores.
Además de los trámites legales habituales y que me pueden llevar años para recuperar a mis hijos, ¿se le ocurre a alguien una idea más rápida para conseguir a mis hijos? Legalmente si es posible. Las soluciones ilegales se me pasan continuamente por la cabeza y no necesito más ideas al respecto.
Además de denunciar a la jueza prevaricadora, a la madre maltratadora, de pedir modificación de medidas, de ir a los medios (que no se atreven a publicarlo), etc.
A pesar del pequeño sarcasmo, la historia (muy resumida) y la consulta es real.
Gracias.
Es vox populi que las denuncias falsas son la inmensa mayoría (prácticamente la totalidad) en los casos de separación. El propio fiscal general del estado en el discurso de inauguración del año judicial se refirió a ello. ¿Dónde están entonces los expedientes por denuncia falsa, sr. fiscal general? ¿Dónde los padres e hijos maltratados por una madre sinvergüenza y una administración de justicia corrupta, sesgada y lenta? ¿Dónde las indemnizaciones por daños y perjuicios (si es que se puede indemnizar el perderte la vida de tus hijos)? ¿Dónde las custodias a favor de los padres víctimas de falsedades? ¿Dónde los hombres asesinados por sus mujeres? ¿Dónde los niños maltratados y asesinados por sus madres? ¿Dónde los hombres suicidados tras perder hasta la dignidad víctimas de la injusticia?...
Mafia de sinvergüenzas...
A la fiscal le pregunté el porqué me condenó entonces y me absuelve ahora pues los elementos de juicio han sido los mismos, NINGUNO, pues en el primer juicio no nos admitieron prueba alguna a ninguna de las partes. En el segundo juicio ella como fiscal ha de perseguir el delito aún no estando presentes los denunciantes (supuestos perjudicados/ofendidos). Se calló la muy...
A la jueza sustituta le pregunté quién me iba a devolver el tiempo perdido, mis hijos, honor, dignidad, salud, economía, etc.
Le pedí a la jueza licencia para querellarme por calumnias e injurias (CP 215) y no me contestó. Le pedí que actuase de oficio por denuncia falsa (CP 456) y no me contestó....
Mientras mis hijos siguen en manos de quien ni les da de comer (pérdidas de peso cercanas al 30%) a pesar de ser su madre (aunque nunca ha ejercido de tal), de quien les cambia cada año de colegio, de quien les sacude si me cuentan cosas, de quien les tiene encerrados todo el día en casa, de quien les tiene enfermos de continuo y ni les lleva al médico ni les compra las medicinas, .... yo sigo inscrito en el registro de maltratadores.
Además de los trámites legales habituales y que me pueden llevar años para recuperar a mis hijos, ¿se le ocurre a alguien una idea más rápida para conseguir a mis hijos? Legalmente si es posible. Las soluciones ilegales se me pasan continuamente por la cabeza y no necesito más ideas al respecto.
Además de denunciar a la jueza prevaricadora, a la madre maltratadora, de pedir modificación de medidas, de ir a los medios (que no se atreven a publicarlo), etc.
A pesar del pequeño sarcasmo, la historia (muy resumida) y la consulta es real.
Gracias.
Es vox populi que las denuncias falsas son la inmensa mayoría (prácticamente la totalidad) en los casos de separación. El propio fiscal general del estado en el discurso de inauguración del año judicial se refirió a ello. ¿Dónde están entonces los expedientes por denuncia falsa, sr. fiscal general? ¿Dónde los padres e hijos maltratados por una madre sinvergüenza y una administración de justicia corrupta, sesgada y lenta? ¿Dónde las indemnizaciones por daños y perjuicios (si es que se puede indemnizar el perderte la vida de tus hijos)? ¿Dónde las custodias a favor de los padres víctimas de falsedades? ¿Dónde los hombres asesinados por sus mujeres? ¿Dónde los niños maltratados y asesinados por sus madres? ¿Dónde los hombres suicidados tras perder hasta la dignidad víctimas de la injusticia?...
Mafia de sinvergüenzas...
Hola Francisco:
Creo que la mejor actitud que puedes tener ahora es la de la "alegría" interior, y pensar que de una manera, tal vez lenta, pero se ha hecho justicia. Ya se que pensarás que ha sido una justicia perturbadora, perniciosa y cruel en el tiempo al haberte hecho daño, según dices, sin prueba alguna y sin argumentos. Pero, y eso es lo importante, al final has sido absuelto o vas a serlo. Y eso, insisto, créeme es lo importante a corto plazo.
Al menos, ya que algunos no podemos disfrutar de una "justicia" inmediata e igualitaria, disfrutemos de la mediata y desigual que con el tiempo siempre conseguiremos cuando tenenos la verdad de nuestro lado.
El siguiente paso, tú mismo ya lo sabes. Sin bajar la guardia, hay que intentar "recuperar" el amor de tus hijos. Pero no solo con la rabia y la energía contundente (legal y noble) hacia quienes tanto daño os han hecho a tí y a tus hijos, sino también utilizando el cariño que van a requerir, y en dosis mayores, esos hijos tuyos que tanto te necesitan.
Ten la fuerza de aunar en ti también energía positiva hacia los niños, pues ellos la van a necesitar. Y lo digo, porque a veces, y yo mismo lo he sentido, dedicamos todas nuestras energías (que con el tiempo se agotan) a luchar contra la injusticia. Pero, compañero Francisco, también nos es necesario amasar energía de la buena, de los pensamientos afectivos hacia nuestros hijos, que pueden ser entorpecidos por las ansias de justicia (e incluso a veces de venganza que debemos apartar de nuestra mente).
Gracias a tí por tu lucha, y te deseo lo mejor.
Un saludo
Creo que la mejor actitud que puedes tener ahora es la de la "alegría" interior, y pensar que de una manera, tal vez lenta, pero se ha hecho justicia. Ya se que pensarás que ha sido una justicia perturbadora, perniciosa y cruel en el tiempo al haberte hecho daño, según dices, sin prueba alguna y sin argumentos. Pero, y eso es lo importante, al final has sido absuelto o vas a serlo. Y eso, insisto, créeme es lo importante a corto plazo.
Al menos, ya que algunos no podemos disfrutar de una "justicia" inmediata e igualitaria, disfrutemos de la mediata y desigual que con el tiempo siempre conseguiremos cuando tenenos la verdad de nuestro lado.
El siguiente paso, tú mismo ya lo sabes. Sin bajar la guardia, hay que intentar "recuperar" el amor de tus hijos. Pero no solo con la rabia y la energía contundente (legal y noble) hacia quienes tanto daño os han hecho a tí y a tus hijos, sino también utilizando el cariño que van a requerir, y en dosis mayores, esos hijos tuyos que tanto te necesitan.
Ten la fuerza de aunar en ti también energía positiva hacia los niños, pues ellos la van a necesitar. Y lo digo, porque a veces, y yo mismo lo he sentido, dedicamos todas nuestras energías (que con el tiempo se agotan) a luchar contra la injusticia. Pero, compañero Francisco, también nos es necesario amasar energía de la buena, de los pensamientos afectivos hacia nuestros hijos, que pueden ser entorpecidos por las ansias de justicia (e incluso a veces de venganza que debemos apartar de nuestra mente).
Gracias a tí por tu lucha, y te deseo lo mejor.
Un saludo
Hola a todos, pienso que lo que dice Nefer puede ser importante, pero en base a las experiencias que he conocido creo que sería difícil saber hasta que punto pudieran estar influenciados por la madre. Por supuesto no conozco el caso del Sr. Zugasti pero sí un poco el del Sr. J. Arapiles por haber hablado personalmente con él.
Y en ese sentido me gustaría copiar aquí y a continuación, una intervención que hice días pasados en una consulta de este mismo foro y en la que venía a colación como también creo que ocurre ahora:
"Yo conozco el caso de un amigo y vecino mío que estuvo conviviendo con una chica durante poco más de un año, al cabo de lo cual ella se quedó embarazada y el se hizo responsable absolutamente de todo y se casó con la chica nada más saberlo, pues aparte de que la quería estaba muy ilusionado con su niña. Pocos meses más tarde dió a luz la mujer, y tan pronto como se recuperó del parto la cogió y se la llevó con su familia a 1000km. de distancia y en donde el padre no pudiera ir a verla, pues aparte de que tenía que trabajar de camarero de sol a sol y cuando le salía trabajo, tampoco le quedaba dinero para viajes después de lo que tenía que pagar por ella.
Pero eso sí, a partir de ahí, la otra no paró de meterlo en juzgados y de sacarle el máximo dinero que pudo a pesar de que trabajaba y ganaba mucho más que él. De esto hace ya años, y la niña creció odiando al padre y pensando que la había abandonado pues, lógicamente, la madre nunca le confesó que había sido ella quien había abandonado a su padre. Sin embargo, él jamás pudo hacer nada para poder ver a su hija, entre otras cosas porque ésta no quería saber nada de él.
Y esto no es un caso aislado, pues conozco otro muy parecido en el que los hijos no quieren ni oir hablar del padre, y cada vez que intenta hablar con ellos lo insultan y le llaman de todo. Hasta el punto de martirizarlo haciéndole creer que lo van a visitar en Navidades para ilusionarlo y después darle en las narices una vez y otra, pues el pobre hombre se desvive por encontrar una ocasión, aún a sabiendas de que puede ser mentira, para poder verlos e intentar hablar con ellos. Este hombre cayó enfermo hace tiempo y tuvo que dejar de trabajar, y su madre es la que está pagando de su pensión, y mientras pueda y viva pues es muy mayor, para evitarle problemas al hijo. Mientras tanto, los nietos trabajan, ganan dinero y se cuidan mucho de que ésto no se pueda demostrar porque entonces posiblemente tuvieran que pasarle alimentos al padre.
Seguramente habrá otros casos muy distintos y que de saberlos los comentaría como hago con éstos, pero personalmente no conozco ninguno. "
Y en ese sentido me gustaría copiar aquí y a continuación, una intervención que hice días pasados en una consulta de este mismo foro y en la que venía a colación como también creo que ocurre ahora:
"Yo conozco el caso de un amigo y vecino mío que estuvo conviviendo con una chica durante poco más de un año, al cabo de lo cual ella se quedó embarazada y el se hizo responsable absolutamente de todo y se casó con la chica nada más saberlo, pues aparte de que la quería estaba muy ilusionado con su niña. Pocos meses más tarde dió a luz la mujer, y tan pronto como se recuperó del parto la cogió y se la llevó con su familia a 1000km. de distancia y en donde el padre no pudiera ir a verla, pues aparte de que tenía que trabajar de camarero de sol a sol y cuando le salía trabajo, tampoco le quedaba dinero para viajes después de lo que tenía que pagar por ella.
Pero eso sí, a partir de ahí, la otra no paró de meterlo en juzgados y de sacarle el máximo dinero que pudo a pesar de que trabajaba y ganaba mucho más que él. De esto hace ya años, y la niña creció odiando al padre y pensando que la había abandonado pues, lógicamente, la madre nunca le confesó que había sido ella quien había abandonado a su padre. Sin embargo, él jamás pudo hacer nada para poder ver a su hija, entre otras cosas porque ésta no quería saber nada de él.
Y esto no es un caso aislado, pues conozco otro muy parecido en el que los hijos no quieren ni oir hablar del padre, y cada vez que intenta hablar con ellos lo insultan y le llaman de todo. Hasta el punto de martirizarlo haciéndole creer que lo van a visitar en Navidades para ilusionarlo y después darle en las narices una vez y otra, pues el pobre hombre se desvive por encontrar una ocasión, aún a sabiendas de que puede ser mentira, para poder verlos e intentar hablar con ellos. Este hombre cayó enfermo hace tiempo y tuvo que dejar de trabajar, y su madre es la que está pagando de su pensión, y mientras pueda y viva pues es muy mayor, para evitarle problemas al hijo. Mientras tanto, los nietos trabajan, ganan dinero y se cuidan mucho de que ésto no se pueda demostrar porque entonces posiblemente tuvieran que pasarle alimentos al padre.
Seguramente habrá otros casos muy distintos y que de saberlos los comentaría como hago con éstos, pero personalmente no conozco ninguno. "
Creo que para poner una denuncia no hace falta el benepácito de un juez/za. La pones y ya está. Cuidado que si tienes que pagar abogado y procurador te puede resultar más cara la mecha que el sebo. Aguantar las injusticias con paciencia es lo que te recomiendo, y mejor olvidarte de tus hijos (conozco un caso -pariente mío-de un padre, a quien le pasó algo parecido, y murió de pena). Yo los perdí, por culpa de su padre, y no tengo esperanza de recuperarlos. Qué más te puedo decir. Rehace tu vida poniendo tus fuerzas no en el rencor, sino en la fe en tí mismo, porque el que sufre por otros es porque es bueno. Debes adoptar un perro, ya que valen más que las personas, que antes o después te dan pasaporte (salvo escasas y raras excepciones).
Estoy bastante de acuerdo con Carmen9, el que sufre es porque es bueno, palos tiene esta vida, pero muchas veces nos asombramos ante cosas que son mas habituales de las que debiera, yo no reprocho nada en absoluto a mucha gente que veo que acaba desesperandose, por su situacion personal, pero no hablo solo de padres o madres separados, el sufrimiento que por los hijos veo en algunos padres no es ni mucho menos patrimonio de la situacion de separacion de pareja, muchos padres sufren la indiferancia, desagradecimiento etc de los hijos, despues de lo que luchas por ellos, y algunos se preguntaran que han hecho mal, yo creo que es una pregunta injusta hacia uno msmo, culparse constantemente por algo que quizas suceda hagas lo que hagas te puede sumar en un estado de infelicidad, yo creo que hay que intentar hacer lo que se pueda en estas situaciones, luchar si, pero seguir viviendo, intentando mejorar nuestra vida, porque hay cosas que no dependen de nosotros, oi una vez una frase " los hijos te quieren en la medida en que te necesitan ", y creo que en algunos casos se cumple, es triste pero es asi, un saludo a todos.
Nefer:
Me alegro de leer tus frases, pues denotan en todo momento empatía y comprensión a cada caso particular; lo cual hoy en día, no es fácil, aunque aparentemente vivamos en una democracia, "el pensamiento único" en cuestiones de familia sigue vigente.
Solo quiero hacer una pequeña reflexión, que bien tendría que tenerse en cuenta a nivel legal. La justicia, en los casos donde el diálogo y la comunicación no es posible, tiene que arbitrar soluciones que, en mi opinión, desde la igualdad y primando por los derechos de los menores, establezcan pautas de comportamiento que permita a los padres y los hijos seguir siendo familia.
Dicho esto, también entiendo que la vida tiene que seguir, pero me apartaría de la última frase que citas: "los hijos te quieren en la media en que te necesitan". Y lo digo, porque creo que el amor también se aprende con el ejemplo, y a los hijos no solo se les debe educar dándoles amor, sino también enseñándoles a ofrecerlo. No se puede concebir el amor sin cierta reciprocidad.
Esa última idea es muy difícil de plasmarse jurídicamente, pero es que pienso que la justicia tampoco puede llegar a esos extremos, pues entonces estaríamos demandándole que fuese más que un instrumento social, una especie de divinidad.
Un saludo
Me alegro de leer tus frases, pues denotan en todo momento empatía y comprensión a cada caso particular; lo cual hoy en día, no es fácil, aunque aparentemente vivamos en una democracia, "el pensamiento único" en cuestiones de familia sigue vigente.
Solo quiero hacer una pequeña reflexión, que bien tendría que tenerse en cuenta a nivel legal. La justicia, en los casos donde el diálogo y la comunicación no es posible, tiene que arbitrar soluciones que, en mi opinión, desde la igualdad y primando por los derechos de los menores, establezcan pautas de comportamiento que permita a los padres y los hijos seguir siendo familia.
Dicho esto, también entiendo que la vida tiene que seguir, pero me apartaría de la última frase que citas: "los hijos te quieren en la media en que te necesitan". Y lo digo, porque creo que el amor también se aprende con el ejemplo, y a los hijos no solo se les debe educar dándoles amor, sino también enseñándoles a ofrecerlo. No se puede concebir el amor sin cierta reciprocidad.
Esa última idea es muy difícil de plasmarse jurídicamente, pero es que pienso que la justicia tampoco puede llegar a esos extremos, pues entonces estaríamos demandándole que fuese más que un instrumento social, una especie de divinidad.
Un saludo
Pues yo no me puedo alegrar por la absolucion de una condena que nunca debio de producirse. Este asunto me parece aterrador, y la justicia deberia aplastar a los culpables y colaboradores en esta injusticia, para asi poder decir que se ha hecho justicia.
Asuntos como este hacen un flaco favor a las muchas mujeres que si estan realmente maltratadas.
Asuntos como este hacen un flaco favor a las muchas mujeres que si estan realmente maltratadas.
Anonimo, has dado en la dana, efectivamente se deduce de tus palabras que hubiera habido justicia a reglón seguido de absorver al denunciado falsamente, los jueces y/o fiscales hubieran obrados o actuados de oficio sirviendo de jurisprudencia una buena y grave condena contra los falsos denunciantes y así de esta forma seguro que se condenarian con más fuerza a los y las maltratadores, es esa la solución a los maltratos tanto a los hijos como a los padres a las vejaciones de y entre las personas, y probablemente a separaciones menos trumáticas y más civilizadas.
Se abusa de las denuncias falsas, porque la justicia con su actuación lenta y defectuosa al punto de condenar a cantidad de personas inocentes.
Moraleja la JUSTICIA, está peor que la SEGURIDAD SOCIAL y es decir.
Saludos
Se abusa de las denuncias falsas, porque la justicia con su actuación lenta y defectuosa al punto de condenar a cantidad de personas inocentes.
Moraleja la JUSTICIA, está peor que la SEGURIDAD SOCIAL y es decir.
Saludos
Hola Tiento, espero que sigas bien, estoy muy de acuerdo con tus ideas, sobre la frase que comentas, aunque es dura, la ley en alguien sitio, y me quede con ella, y por los casos que ves en este foro, a veces ves que se vuelve realidad, a eso me referia, no quiero decir que siempre sea asi, pero tienes que estar conmigo en que en este foro hay mucha gente que tiene infinidad de problemas con sus hijos, y no creo que sea por falta de amor, porque el amor de esos padres se destila en las palabras que comunican en sus mensajes, y se les ve sufrir,sino sintieran ese amor no escribirian con esa pena y ese sufrimiento,y si ese amor se tramsmite en sus mensajes, seguro que enseñan amor, pero a veces se ven casos que a pesar de todo ese amor no reciben lo mismo a cambio, y estoy de acuerdo contigo, en que este problema no es un tema a solucionar en los tribunales, desde luego, un saludo Tiento.
Amonimo y Abuelo, yo si me alegro de la absolucion de una condena, por algo se empieza, pero tambien estoy con vosotros en que estamos en pañales en la practica de la justicia en cuanto a denuncias falsas y todo tipo de coaccion basado en la mentira realizado de mala fe, y estoy de acuerdo en que habria que denunciar mas las falsas denuncias, y que se aplicaran penas, las que la ley marca, que igual que se aplica la ley de violencia de genero a rajatabla, con la cual si existe estoy de acuerdo con ella, pero yo no diria mas de genero, sino de violencia en general, que la hay de todos los tipos, ya se que es dificil, pero hay penas para los progenitores que se saltan a la torera los regimenes de visitas para con el otro progenitor, y ya sabemos de que colectivo mayoritario estamos hablando, entonces, existiendo esas penas, porque no se aplican?, porque yo no conozco ninguno, el caso es que la ley establece el derecho por igual para ambos progenitores, pero a la hora de la verdad, no hay ningun problema en mandar aun padre a la carcel por impago de pension por alimentos, o embargarle los bienes para que se cobren los impagos, entonces, porque no se aplica tambien, cuando se imcumplen reiteradamente los regimenes de visitas?, porque la ley existe, y hasta esta recogido que el alienador puede perder por ello si es reiterativo la custodia, como ley no hace mucho es este foro escrito por un forero, mal esta todo, pero amigos foreros, la pension por alimentos se puede recuperar incluso con intereses, la falta de contacto de un hijo con sus progenitores, eso no se puede recuperar, hay padres y madres no lo dudo tambien, que se han perdido la infancia o adolescencia de sus hijos, quien les va a resarcir de ello?
fijaros en este caso de denuncia falsa de malos tratos y violación que aparece hoy en abc en la sección de noticias de toledo:
TEXTO: MANUEL MORENO/
TOLEDO. En un pueblo de apenas 3.000 habitantes situado a 45 kilómetros de Torrijos, Miguel se recupera de la pesadilla que vivió a primeros de mes. Su compañera sentimental, Asunción -ambos son nombres ficticios-, lo denunció primero ante la Guardia Civil por maltrato familiar, pero después ella agravó deliberadamente la acusación delante de la juez, a la que contó que Miguel era un violador. Él estuvo a un paso de ingresar en prisión, aunque la imputación falsa de Asunción no prosperó y ella será ahora quien deba aclarar ante la Justicia por qué lo denunció.
La pareja, que no está casada, se encontraba negociando la liquidación de las propiedades y, según Miguel, Asunción pretendía, con esa maquiavélica actitud, quedarse con la mitad de las posesiones (un chalé, otros bienes inmuebles y un coche).
A día de hoy, y a pesar de lo que ha ocurrido, Miguel debe seguir viviendo en su chalé -lo compró hace años- con la persona que quiso ponerle de patitas en una cárcel. Él va a pedir la orden de alejamiento para Asunción, que ya le había amenazado con echarle de casa si no repartían «como ella quería».
Una noche en la garita
Quizá varios hombres se vean reflejados en el terrible episodio de Miguel, que arranca la noche del 7 de febrero. Cuando él llega a casa, Asunción está viendo la televisión en el salón. Poco después, ella se marcha misteriosamente. Al cabo de una hora, pasadas las once, la Guardia Civil se persona en la vivienda: «Su mujer le ha denunciado por malos tratos psicológicos». Los agentes le advierten que no le detendrán si se compromete a no dormir en casa. Miguel acepta, coge algunos bártulos y se marcha a las dos de la mañana a buscar una pensión, pero no encuentra habitación y decide irse a su empresa, en Madrid, donde pasa la noche en la garita del vigilante.
Seis horas después, vuelve a Torrijos para comparecer a mediodía en un juicio rápido que no llega a celebrarse. ¿El motivo? Minutos antes, Asunción ha asegurado a la juez que Miguel la ha violado al menos en tres ocasiones entre mayo y junio de 2004. «Es la primera vez que lo denuncio», asegura a su señoría. Pero Asunción va más allá: dice saber que ha habido denuncias de otras mujeres contra Miguel por malos tratos, incluso asegura que existe una condena por violación y que ha llegado a abusar de la hija que él tiene con otra mujer (en realidad, el vástago no es hembra, sino varón). Después de la retahíla, la compañera de Miguel durante dos años y medio pide una medida de alejamiento y manifiesta su deseo de quedarse en el hogar familiar.
El abogado del supuesto maltratador insinúa a Miguel que es posible que duerma en la prisión de Ocaña debido a las durísimas aunque falsas acusaciones de violación. Es media tarde. Miguel desmiente categóricamente ante la juez que haya sido denunciado por alguna mujer. «Esta es la primera vez -asegura- que me veo en una cosa como ésta». Y cuenta su historia. Cuando la pareja comienza la relación -ambos eran separados-, Asunción le dijo que él se iba a dedicar a trabajar y que ella -sin empleo remunerado hasta hoy- llevaría la administración de la casa.
La operación de estética
Pero la relación hace aguas cuando Asunción tiene problemas con la familia de ella por una herencia. En noviembre de 2004 -relata Miguel- empiezan a llegar deudas de tarjetas bancarias, de la casa, del coche, muebles, electrodomésticos.... Tampoco se había pagado al banco seis mensualidades de la hipoteca de la vivienda, en total, 3.456 euros. Miguel tuvo que pedir con urgencia dinero a su madre y una cantidad por adelantado a su empresa. Evidentemente, Asunción había abandonado la administración de la casa, pero se había hecho una operación de estética (liposucción y arreglo de pechos) que pagó con dinero de la pareja: 8.000 euros. «A la mujer le pillamos mentira tras mentira. El chalé lo compró mi cliente, el coche lo está pagando mi cliente, la operación se pagó con dinero de mi cliente y él no tiene una hija, como dijo ella, sino hijo», explica el abogado Miguel Ángel García Huerta.
Dadas las contradicciones en las versiones de Miguel y Asunción, la juez llama a declarar a las hijas que ella tiene de una relación anterior. Confirman que han visto discusiones en la pareja, pero que no apreciaron maltratos físico ni psíquico. A las once de la noche, la juez resuelve que la denuncia de Asunción por maltrato y violación no tiene verosimilitud, y acuerda también proceder contra la mujer por denuncia falsa. El miedo de Miguel a la cárcel se esfuma. En esta ocasión, el maltratador no tenía nombre de varón.
TEXTO: MANUEL MORENO/
TOLEDO. En un pueblo de apenas 3.000 habitantes situado a 45 kilómetros de Torrijos, Miguel se recupera de la pesadilla que vivió a primeros de mes. Su compañera sentimental, Asunción -ambos son nombres ficticios-, lo denunció primero ante la Guardia Civil por maltrato familiar, pero después ella agravó deliberadamente la acusación delante de la juez, a la que contó que Miguel era un violador. Él estuvo a un paso de ingresar en prisión, aunque la imputación falsa de Asunción no prosperó y ella será ahora quien deba aclarar ante la Justicia por qué lo denunció.
La pareja, que no está casada, se encontraba negociando la liquidación de las propiedades y, según Miguel, Asunción pretendía, con esa maquiavélica actitud, quedarse con la mitad de las posesiones (un chalé, otros bienes inmuebles y un coche).
A día de hoy, y a pesar de lo que ha ocurrido, Miguel debe seguir viviendo en su chalé -lo compró hace años- con la persona que quiso ponerle de patitas en una cárcel. Él va a pedir la orden de alejamiento para Asunción, que ya le había amenazado con echarle de casa si no repartían «como ella quería».
Una noche en la garita
Quizá varios hombres se vean reflejados en el terrible episodio de Miguel, que arranca la noche del 7 de febrero. Cuando él llega a casa, Asunción está viendo la televisión en el salón. Poco después, ella se marcha misteriosamente. Al cabo de una hora, pasadas las once, la Guardia Civil se persona en la vivienda: «Su mujer le ha denunciado por malos tratos psicológicos». Los agentes le advierten que no le detendrán si se compromete a no dormir en casa. Miguel acepta, coge algunos bártulos y se marcha a las dos de la mañana a buscar una pensión, pero no encuentra habitación y decide irse a su empresa, en Madrid, donde pasa la noche en la garita del vigilante.
Seis horas después, vuelve a Torrijos para comparecer a mediodía en un juicio rápido que no llega a celebrarse. ¿El motivo? Minutos antes, Asunción ha asegurado a la juez que Miguel la ha violado al menos en tres ocasiones entre mayo y junio de 2004. «Es la primera vez que lo denuncio», asegura a su señoría. Pero Asunción va más allá: dice saber que ha habido denuncias de otras mujeres contra Miguel por malos tratos, incluso asegura que existe una condena por violación y que ha llegado a abusar de la hija que él tiene con otra mujer (en realidad, el vástago no es hembra, sino varón). Después de la retahíla, la compañera de Miguel durante dos años y medio pide una medida de alejamiento y manifiesta su deseo de quedarse en el hogar familiar.
El abogado del supuesto maltratador insinúa a Miguel que es posible que duerma en la prisión de Ocaña debido a las durísimas aunque falsas acusaciones de violación. Es media tarde. Miguel desmiente categóricamente ante la juez que haya sido denunciado por alguna mujer. «Esta es la primera vez -asegura- que me veo en una cosa como ésta». Y cuenta su historia. Cuando la pareja comienza la relación -ambos eran separados-, Asunción le dijo que él se iba a dedicar a trabajar y que ella -sin empleo remunerado hasta hoy- llevaría la administración de la casa.
La operación de estética
Pero la relación hace aguas cuando Asunción tiene problemas con la familia de ella por una herencia. En noviembre de 2004 -relata Miguel- empiezan a llegar deudas de tarjetas bancarias, de la casa, del coche, muebles, electrodomésticos.... Tampoco se había pagado al banco seis mensualidades de la hipoteca de la vivienda, en total, 3.456 euros. Miguel tuvo que pedir con urgencia dinero a su madre y una cantidad por adelantado a su empresa. Evidentemente, Asunción había abandonado la administración de la casa, pero se había hecho una operación de estética (liposucción y arreglo de pechos) que pagó con dinero de la pareja: 8.000 euros. «A la mujer le pillamos mentira tras mentira. El chalé lo compró mi cliente, el coche lo está pagando mi cliente, la operación se pagó con dinero de mi cliente y él no tiene una hija, como dijo ella, sino hijo», explica el abogado Miguel Ángel García Huerta.
Dadas las contradicciones en las versiones de Miguel y Asunción, la juez llama a declarar a las hijas que ella tiene de una relación anterior. Confirman que han visto discusiones en la pareja, pero que no apreciaron maltratos físico ni psíquico. A las once de la noche, la juez resuelve que la denuncia de Asunción por maltrato y violación no tiene verosimilitud, y acuerda también proceder contra la mujer por denuncia falsa. El miedo de Miguel a la cárcel se esfuma. En esta ocasión, el maltratador no tenía nombre de varón.
Para Luís Córdoba.
Los asistentes sociales, en mi caso y me consta que en la inmensa mayoría de los casos, han cometido falsedad documental y falso testimonio al ratificarse en el juzgado.
Sin conocerme a mi ni a mis hijos ni a los profesores han hecho un informe en el que me ponen a parir y a la madre la ponen de santa Teresa.
Baste un ejemplo: dicen que el director del colegio les ha dicho (y lo entrecomillan poniéndoselo en su boca) que yo pido constantemente informes de la evolución de los niños pero que no voy a tutoría nunca. La conclusión es evidente. El padre no tiene interés alguno en sus hijos y lo únioco que quiere es tocar los...
Pero la realidad es que soy yo quien va todos los lunes a tutoría y a las fiestas del cole. Es mi ex quien no va nunca. Es mi ex quien pide informes y yo no he pedido aún ninguno.
De hecho los profesores me preguntaron qué le había hecho yo a la trabajadora social para que pusiera tantas mentiras. Mi respuesta fue fácil. No le he hecho nada porque ni la conozco.
¿Cuánta gente come y a dos carrillos de las separaciones?
Los asistentes sociales, en mi caso y me consta que en la inmensa mayoría de los casos, han cometido falsedad documental y falso testimonio al ratificarse en el juzgado.
Sin conocerme a mi ni a mis hijos ni a los profesores han hecho un informe en el que me ponen a parir y a la madre la ponen de santa Teresa.
Baste un ejemplo: dicen que el director del colegio les ha dicho (y lo entrecomillan poniéndoselo en su boca) que yo pido constantemente informes de la evolución de los niños pero que no voy a tutoría nunca. La conclusión es evidente. El padre no tiene interés alguno en sus hijos y lo únioco que quiere es tocar los...
Pero la realidad es que soy yo quien va todos los lunes a tutoría y a las fiestas del cole. Es mi ex quien no va nunca. Es mi ex quien pide informes y yo no he pedido aún ninguno.
De hecho los profesores me preguntaron qué le había hecho yo a la trabajadora social para que pusiera tantas mentiras. Mi respuesta fue fácil. No le he hecho nada porque ni la conozco.
¿Cuánta gente come y a dos carrillos de las separaciones?
Yo me pregunto , como es que los hombres se casan con este tipo de mujeres.. No lo entiendo.. una persona antes de casarse o juntarse con otra , la debe conocer a fondo , no?? O se dejan engañar por un fisico espléndido acaso o van de bobos por la vida? Porque mira , la mujer de Francisco es perversa por lo que nos cuenta.. me pregunto porque actúa así? Que le lleva a la gente a funcionar de esta manera? La codicia, la mala leche? Francisco , no te diste cuenta en ningun momento antes de casarte que tu mujer era chunga? Nunca te dio ninguna manifestación de ello? O se "volvió" así después del divorcio? No lo comprendo, lo siento... De todas formas te deseo lo mejor y ojalá se te arreglen pronto las cosas, porque es muy dura tu historia,
Un abrazo y suerte!
Un abrazo y suerte!
JJT:
Yo no soy quién para responder por Francisco. Pero sin embargo, lo que si que me pregunto es ¿no conoces a nadie que después de una amistad o de una relación ha tenido comportamientos injustos?. Hoy en día creo que es muy difícil encontrar personas totalmente íntegras, y en mi opinión lo sorprendente es encontrarlas, por mucho que se la intente conocer a fondo.
Pienso que la sociedad vive momentos de cambio en muchos aspectos, la libertad parece que no se sabe asumir. Y en ese sentido vivimos en una paradoja: tenemos más libertad que nunca y sin embargo tenemos menos recursos para manejarla.
Después de un divorcio muchas personas se quedan desestructuradas mentalmente. No saben afrontar el cambio que les depara, su teórica liberación, y si manejan algún tipo de poder (como el que se les concede a muchas personas para custodiar a sus hijos y disponer de mayores garantías económicas por ello), pueden hacer un mal uso de ese poder debido a su desestructuración personal. Ello significa que el rencor, el egoísmo, la rabia, dejan huella, y si no se sabe asimilar el dolor de una pérdida, pueden comportar actos vengativos y crueles para con el ser odiado. No es algo que nos deba extrañar en las personas.
Sin embargo creo que la justicia y la ley, aún no siendo los directos responsables de los conflictos, si promueven cierto grado de discriminación y desigualdad por cuestiones de género, y atribuciones de derechos desiguales. No es que piense que haya una prevaricación o una intencionalidad, pero si una interpretación de las leyes sesgadas y contaminadas socialmente. Ello comporta que algunas personas abusen del "poder" que se les concede, sobre todo con sus hijos, y lo instrumentalicen para causar daño.
Preguntarle a Francisco el porque se casó o juntó con una determinada persona no es la solución a su problema, ni al mío, ni al de muchos compañeros y compañeras, pues simplemente se logra redundar en la herida. Las pesonas llevamos el bien y el mal dentro de nostros mismos.
En mi opinión la solución, y solamente parcial, es reglamentar unos cauces de prevención y educación basados en la igualdad, y en los casos donde se produzca conflicto, promover mediaciones fundamentadas en el equilibrio. Uno de los posibles recursos es el de la custodia compartida (pues lamentablemente la patria potestad compartida no es algo que se pueda objetivar). Entrar en asuntos más íntimos y personales queda en manos de la propia persona y en su reflexión.
Un saludo
Yo no soy quién para responder por Francisco. Pero sin embargo, lo que si que me pregunto es ¿no conoces a nadie que después de una amistad o de una relación ha tenido comportamientos injustos?. Hoy en día creo que es muy difícil encontrar personas totalmente íntegras, y en mi opinión lo sorprendente es encontrarlas, por mucho que se la intente conocer a fondo.
Pienso que la sociedad vive momentos de cambio en muchos aspectos, la libertad parece que no se sabe asumir. Y en ese sentido vivimos en una paradoja: tenemos más libertad que nunca y sin embargo tenemos menos recursos para manejarla.
Después de un divorcio muchas personas se quedan desestructuradas mentalmente. No saben afrontar el cambio que les depara, su teórica liberación, y si manejan algún tipo de poder (como el que se les concede a muchas personas para custodiar a sus hijos y disponer de mayores garantías económicas por ello), pueden hacer un mal uso de ese poder debido a su desestructuración personal. Ello significa que el rencor, el egoísmo, la rabia, dejan huella, y si no se sabe asimilar el dolor de una pérdida, pueden comportar actos vengativos y crueles para con el ser odiado. No es algo que nos deba extrañar en las personas.
Sin embargo creo que la justicia y la ley, aún no siendo los directos responsables de los conflictos, si promueven cierto grado de discriminación y desigualdad por cuestiones de género, y atribuciones de derechos desiguales. No es que piense que haya una prevaricación o una intencionalidad, pero si una interpretación de las leyes sesgadas y contaminadas socialmente. Ello comporta que algunas personas abusen del "poder" que se les concede, sobre todo con sus hijos, y lo instrumentalicen para causar daño.
Preguntarle a Francisco el porque se casó o juntó con una determinada persona no es la solución a su problema, ni al mío, ni al de muchos compañeros y compañeras, pues simplemente se logra redundar en la herida. Las pesonas llevamos el bien y el mal dentro de nostros mismos.
En mi opinión la solución, y solamente parcial, es reglamentar unos cauces de prevención y educación basados en la igualdad, y en los casos donde se produzca conflicto, promover mediaciones fundamentadas en el equilibrio. Uno de los posibles recursos es el de la custodia compartida (pues lamentablemente la patria potestad compartida no es algo que se pueda objetivar). Entrar en asuntos más íntimos y personales queda en manos de la propia persona y en su reflexión.
Un saludo
Fco Zugasti, ¿de qué juzgado estamos hablando, o al menos de qué localidad?. Creo que evidentemente hay asistentas sociales que por lo que se ven son feministas y están en estos puestos claves a sabiendas. Mi consejo es denunciar a dicho personal público, y si no te dan la razón recurrir. Podrías aportar unos informes que contradigan lo manifestado por la asistenta y psicóloga si fuera el caso. Esto también podría ser utilizado para invalidar el juicio.
Dejémonos de tonterías. Veamos, Francisco zugasti. Has dicho que hace un año que no sabes nada de tus hijos para poner poco después que eres tu el que va los lunes a las tutorías y a las fiestas del cole. ¿te has confundido de tiempo verbal? Espero que sea eso y no una falsedad más de las muchas que denuncias.
Y quiero que sepas, que aquí, en Lugo, si mi ex.mujer trata a mis hijos como dices tu que son tratados los tuyos, la Xunta se los quita, SE LOS QUITA, previa denuncia mía.
¿Puedes contestar a la pregunta que ya te hicieron y decir de que comunidad hablas?
ah. la patria potestad ahora la retiran con un plumero. ¿A quien creemos?
Ni nadie es tan bueno ni nadie es tan malo.
Saludos.
Y quiero que sepas, que aquí, en Lugo, si mi ex.mujer trata a mis hijos como dices tu que son tratados los tuyos, la Xunta se los quita, SE LOS QUITA, previa denuncia mía.
¿Puedes contestar a la pregunta que ya te hicieron y decir de que comunidad hablas?
ah. la patria potestad ahora la retiran con un plumero. ¿A quien creemos?
Ni nadie es tan bueno ni nadie es tan malo.
Saludos.
