Un amigo de 82 años hizo un testamento hace 3 años, aún está en vida.
Ahora hace 6 meses viendo que estaba perdiendo la memoria, le hizo un poder notaríal a uno de los hijos, es este quien lleva ahora el dinero del señor.
Mi pregunta es, si este hijo con ese poder puede cambiar el testamento del padre, que sigue en vida, aunque cada vez con menos recuerdos.
El testamento es un acto personalísimo. Tan personal y tan íntimo, que el solo hecho de que lo conozca alguien distinto al interesado puede ser constitutivo de delito. Lo cual significa que si el apoderado aparece en una notaría intentando cambiar el testamento del poderdante, pueden llamar a la policía.
El testamento es la más descarnada y grave que puede ocurrirle a una persona de forma ineludible, y es la aceptación de su propio final. Respetémoslo. Es nuestra última y absoluta voluntad. Ninguna comunidad autónoma podrá sustuir eso. Los hijos son hijos. No existen hijos que dependan de las relaciones afectivas de su padre, sino del ser y la vida.