En una vivienda que tengo alquilada el inquilino ha montado un tugurio para prácticas sexuales.
Para ello ha pintado la casa con otros colores y ha cambiado la decoración, todo ello sin autorización.
Por el momento no hay quejas de los vecinos ni problemas de pago de las cuotas y gastos.
Me he enterado por casualidad. ¿Cómo debo proceder?
Todo dependerá, de lo bien que tenga redactado el contrato de arrendamiento y las prohibiciones que en él se establezcan.
En cualquier caso, debería cubrirse a futuro, denunciando los hechos en el Ayuntamiento, para que procedan a inspeccionar la actividad en esa vivienda.
Con respecto a la pintura de fachada, usted mismo. Envíele un escrito, exigiéndole que vuelva a pintar la fachada en la situación anterior.
En el contrato de arredamiento figuran las prohibiciones sobre actividades molestas, insalubres, deshonestas, nocivas y peligrosas, actividades profesionales colegiadas o actividades lucrativas de cualquier tipo.
También figuran las prohibiciones de ceder, subarrendar, o traspasar la vivienda, así como el compromiso a no realizar ni ejecutar en el mismo, obra, variación, modificación o instalación alguna, sin obtener previamente autorización expresa y por escrito de la propiedad. También se obliga a mantener la vivienda y sus instalaciones en perfectas condiciones para servir a su destino, obligándose a dejar la finca en iguales condiciones en las que la recibió o en su defecto a satisfacer en metálico el importe de lo que supone restituirla a su estado original.
Si el uso es en el ámbito privado, ¿está incurriendo en algún incumplimento? La única forma de comprobar los rumores es entrando en la vivienda y se requiere el permiso del inquilino.
Acriton, gracias por tu respuesta.
Perdona que insista, pero me sigo preguntando si se puede intervenir cuando el asunto es un acto privado. Por el momento no hay forma de comprobar los hechos sin entrar en la vivienda sin permiso del inquilino. ¿Sería allanamiento de morada?