Me gustaria que algun profesional me dijera que es lo que tengo que hacer cuando tengo la sensacion de que mi hijo esta desamparado. He denunciado el caso en Asistencia Social,en Proteccion de menores,lo intente en el juzgado pero no me admitieron la presentacion de la denuncia. Despues de aportar pruebas,que considero importantes,y de pasarse un tiempo mas que prudencial,sin ver ninguna reaccion oficial de ningun tipo,ni haber recibido una certificacion de que estas "denuncias"estaban puestas.Mi pregunta es la siguiente: que tengo que hacer al escuchar a la madre del niño decir"no tengo tiempo para ayudarle a hacer sus tareas" Solo me queda manifestar la siguiente: La justicia en este pais, no es justa con los menores.Los fiscales de este pais , no cumplen con su obligacion de velar por los menores.La justicia de este pais en los casos de separacion falla sistematicamente
Dispone el art. 158 CC que el Juez de oficio, a instancia del propio hijo, de cualquier pariente o del Ministerio Fiscal, dictará: ...3º.- En general, las demás disposiciones que se consideren oportunas, a fin de apartar al menor de un peligro o de evitarle perjuicios Todas estas medidas podrán adoptarse dentro de cualquier proceso civil o penal o bien en un procedimiento de jurisdiccion voluntaria."
Un saludo.
¿De verdad cree usted que su hijo está desamparado porque la madre no tiene tiempo de ayudarle en sus tareas? No sé si he entendido bien, espero que no porque me parecería increible.
yo también estoy con Sara y Fermin desamparo no es precisamente no tener tiempo para ayudar a un hijo en sus tareas, pero entiendo que las razones del que pregunta son trascendentes aunque no las especifique. Si no fuera así, la verdad, es que es una pena.
Un saludo.
Akela pide ayuda ante la sensación que tiene de que su hijo está desamparado. Va y viene a muchas instituciones donde no le hacen caso y además oye decir a la madre que no tiene tiempo para ayudarle a hacer sus tareas.
Sara, alegato y quizá otras personas dejan calar la idea de que Akela debe de ser una una especie de perturbado, puesto que denunciarla sólo por eso es a todas luces exagerado.
Y sin embargo...
Sin embargo, el hijo de Akela puede tener un año. Puede que la madre no le ayude en sus tareas y el bebé tenga que cambiarse solo los pañales, ante lo que se está pudriendo en un charco de orines. Es posible que a los 7 meses no le diera los potitos, ante lo cual el bebé esté famélico, y es posible que la madre le obligue caminar desde los 9 meses, ante lo cual se le estén curvando las piernas.
Todo eso es posible, ¿verdad que sí?.
Ahora volvamos a leer el mensaje de Akela y pensemos si no hemos prejuzgado. Y ya que estamos, en un ejercicio de ética quizá deberíamos preguntarnos por qué hemos prejuzgado,
Decididamente debo ser extraterrestre, no lo entiendo como es posible que tanto Alegato precisamente un letrado prejuzgue a un padre antes de conocer y de la auténtica razón y de pávulo a señoras que de entrada ponen en duda la propia pregunta que nos hace un padre desesperado que dice claramente que a acudido a varias instancias oficiales de entre ellas al juzgado donde no le aceptan la denuncia a la Asistentas Sociales de Protección al Menor etc.
Usted precisamente usted señor Alegato (abogado letrado de la legalidad y demás, lo que da entender o se desprende de su anonimato Alegato), decía precisamente usted aconseja que se acuda al Ministerio Fiscal, pero sabe usted muy bien que eso en España no funciona al menos en la mayoría de los casos, las quejas de los ciudadanos entre otras y con bastante asiduidad es precisamente ¿qué hacen los Fiscales?.
En fin como me dijo una gitana maldiciéndome, juicios tengas y los ganes, ¿que si los pierdes?.
O bien como también un señor letrado me aconsejó en cierta ocasión: más vale un mal acuerdo con la empresa, que un juicio contra ella.
Estimado SR. ABUELO comprendo su estado de indignación y sus buenas intenciones por cambiar el mundo (por lo menos en lo que se refiere al cumplimiento del régimen de visitas); aunque como ya le he manifestado en otros lugares de este foro donde vd. participa "machanonamente" con un mismo tema (ver a su nieto), transcribiendo incluso problemas de otros, no comparto su tremendismo ni su exagerado pesimismo.
Tanto a vd., como a AdelKa, yo no los he juzgado, Dios me libre.
Vd. preguntó acerca de su problema de relación con su nieto (donde está la justicia 1,2 y3) y en el prmer capítulo de su odisea yo le contesté expresamente que compartía su crítica aunque no su tremendismo e intenté con mi intervención dar una versión imparcial y nada apasionada del problema que atañe al incumplimiento del régimen de visitas. (LEA VD. LAS RESPUESTAS). Vd. pretende de mí que entre en su juego, en su guerra, en su patología y eso, por razones que son obvias, no lo pienso hacer.
Con respecto a Adelka y la pregunta que plantea en este apartado del foro, yo he contestado de forma expresa y transcribiendo el art. 158 del CC que puede ser aplicable a su caso. En ningún momento he entrado a valorar su asunto, es más, he salido al frente de su postura, cuando otros contertulios entienden y con razon que no tener tiempo para poder ayudar al niño en sus tareas (imaginamos todos que las escolares) no es en sí un caso de desamparo. En mi segunda intervención en este apartado del foro me limito a decir que estoy seguro que las razones de Adelka son MAS TRASCENDENTES aunque no nos las diga dado que si no fuera así sería una pena.
Como verá tanto en su caso, como en el de Adelka, yo no he valorado situaciones personales entre otras cosas porque desconozco completamente la problemática (al menos en el caso de AdelKa)
Ahora bien, dicho lo anterior, y por lo que a vd. se refiere entiendo que las poturas tremendistas y exageradamente cargadas de indignación, CUANDO EXISTE UN MENOR IMPLICADO, deben ser atemperadas por bien del mismo y sin que ello signifique que le esté quitando la razon. Ahora bien, lo que no resulta muy normal es la declaración de guerra incontrolada entre un padre y una madre, a la que ahora se une la del abuelo. (juicios, denuncias, etc, etc.,etc.)
Un abrazo