Dos menores de 9 y 7 años de edad, tutelados por la administración pública y residentes en un centro de menores desde los dos años, están inmersos en un proceso de acogida familiar que todavía no se ha completado. Ambos menores desean ser acogidos por la familia acogedora. La madre biológica, con graves problemas de desestructuración personal y familiar, y que está inhabilitada judicialmente para hacerse cargo de sus hijos, ha recurrido a un abogado para impedir el acogimiento de los menores; a su vez está reclamando tener más contacto telefónico con ambos menores y más visitas, a pesar de que un equipo multidisciplinar ya ha establecido la nocividad de tener más de una visita mensual en dependencias controladas, por repercutir muy negativamente en ambos menores.
Mi pregunta es: ¿en caso que la madre pretenda aumentar estos contactos con los menores, existe alguna posibilidad legal de negárselo cautelarmente y mantener esos contactos como hasta ahora (una vez al mes) hasta que se celebre el juicio tras la demanda que ha interpuesto?