¿Compensa perder el tiempo rellenando y enviando formularios, y reclamando constantemente ‘puntos’ o ‘millas’?
¿Vale la pena ‘ganar millas’ de una determinada aerolínea renunciando a viajar en otras aerolíneas que no ofrecen ‘millas’ pero que son más económicas, o que sus vuelos son más cómodos o convenientes?
¿Realmente sirve de algo ser titular de tarjetas como la del programa TAP-Victoria?
Practicamente todos los meses viajo desde España al litoral nordeste de Brasil. Soy un ‘viajero frecuente’ de TAP (Transportes Aéreos de Portugal, S.A.), una de las aerolineas integradas en STAR ALLIANCE.
Estoy adscrito al ‘Programa TAP-Victoria’, que teoricamente, según se anuncia, ‘reporta valiosas y únicas ventajas...’, y, entre ellas, la de poder canjear puntos o ‘millas’ por billetes de avión en todos los vuelos regulares de TAP y de las demás aerolíneas integradas en STAR ALLIANCE.
Tras varias semanas de múltiples y frustrados intentos telefónicos, y también via internet y via email, he llegado a la conclusion de que resulta imposible hacer uso de los beneficios que supuestamente ofrece el "programa Viajero Frecuente"' de la aerolínea TAP, y, en concreto, resulta imposible en la práctica materializar la reserva de billetes para vuelos utilizando las millas acumuladas con las tarjetas TAP-Victoria, pues no solo no hay manera de reservar billete o vuelo ("casualmente"', aunque hay billetes a la venta, no hay disponibilidad de asientos utilizando las "'millas Victoria" en ningún vuelo durante semanas y semanas, e incluso meses), sino que, además, resulta absolutamente imposible conseguir información respecto a las fechas de disponibilidad de asientos utilizando las ‘millas’ acumuladas en la antes indicada tarjeta.
"'En teoría", según consta en la página "Utilizar millas -condiciones" de la web www.tapvictoria.com, los puntos o millas se pueden utilizar para TODOS los vuelos regulares operados por la TAP, tanto en clase económica como en clase ejecutiva. Cierto que, después, en "letra pequeña", en otra página no tan facilmente accesible, se viene a decir, hablando en plata, que la "'TAP puede hacer lo que le dé la gana", como por ejemplo, alterar unilateralmente las condiciones de la relación contractual con sus clientes, en cualquier momento y sin previo aviso, así como "'anular" las millas obtenidas por sus clientes, o decidir si cumple o no cumple sus obligaciones, cuando y como.
Se trata de una increíble y curiosa "relacion contractual" (así califica el propio programa Victoria la relacion entre TAP y sus clientes) cuya validez y cumplimiento queda enteramente al arbitrio de uno de los contratantes, lo cual constituye un ‘engendro contra natura’ que, como es lógico, está terminantemente prohibido por el Código Civil español y, es de suponer, por la normativa y la jurisprudencia de otros países civilizados de nuestro entorno.
La aerolínea portuguesa TAP no solo usa sus "prerrogativas" para limitar el número de plazas adquiribles con ‘millas’ en algunos vuelos, sino que, de facto, abusa de tan leoninas condiciones contractuales, pues, en la práctica, excluye totalmente la posibilidad de conseguir plazas para todos sus destinos en zonas geograficas bien amplias, como por ejemplo, todo Brasil, cuyas ciudades copan el grueso de los vuelos trasatlanticos de la aerolínea portuguesa.
Por supuesto, NO existe un calendario o programa con la disponibilidad de asientos para los distintos destinos y fechas, y las amables señoras o señoritas que atienden el telefono del ‘Servicio al Cliente’ de TAP tampoco pueden/quieren dar esa información. ¿Qué hay que hacer para poder utilizar las millas de la tarjeta TAP-Victoria? Ah! Eso quisiera yo saber, pero debe ser uno de los misterios mejor guardados de la Humanidad!!!
¿De que valen las millas de la TAP-Victoria si en la practica el usuario no puede reservar asiento o billete a los destinos y en las fechas que le interesan (aunque las reservas solicitadas sean ‘flexibles’, tanto en fechas como en destinos)?. La aerolínea portuguesa, como es habitual, ‘no sabe / no contesta’, ni dá explicaciones, ni hace comentarios, ni corrige sus posibles errores o abusos, ni tiene el más mínimo interés en dar satisfacción a sus mejores clientes (¿cómo trata TAP a los viajeros ocasionales?: esa es otra historia, que quizás más adelante cuente y documente).
Ignoro si las demás aerolíneas integradas en STAR ALLIANCE tratan a sus mejores clientes, los titulares de tarjetas de ‘Viajero Frecuente’, del mismo modo que TAP trata a los suyos, pero lo cierto es que, cuando se le solicitaron aclaraciones o explicaciones, dicha ‘alianza de aerolíneas’, dio la callada por respuesta. ¿Simple desidia o desprecio hacia un cliente de una de sus afiliadas? ¿O sería por no dejar en evidencia a la aerolínea portuguesa TAP, ó porque todas las aerolíneas afiliadas operan de igual o análoga forma? En casos así, el silencio sepulcral hace sospechar lo peor...
En resumen, y en mi experiencia personal, la tarjeta TAP-Victoria, y posiblemente las de otras aerolíneas integradas en STAR ALLIANCE, en la práctica sirven para bien poco, salvo que sus titulares estén dispuestos a soportar las molestias, los gastos y las pérdidas de tiempo que supondría tener que reclamar sus (negados) derechos en los tribunales, esos ‘derechos’ que algunas aerolíneas como TAP ‘venden’ a efectos de publicidad y marketing pero que después no respetan, al menos voluntariamente y de buen grado. Afortunadamente, a los sufridos consumidores todavía nos queda el ‘derecho al pataleo’ y al ‘ciberpataleo’ (más estruendoso y más efectivo, especialmente si se ‘cuela’ en algun lugar destacado de GOOGLE). A veces, desgraciadamente, en la práctica, es, casi, nuestro único derecho.
Si algunas aerolíneas, como TAP, o ‘alianzas de aerolíneas’, como STAR ALLIANCE, lo que pretenden es premiar y dar satisfacción a sus mejores clientes, los ‘viajeros frecuentes’, lo que tienen que hacer es cumplir sus compromisos de buena fé y no defraudarlos con ‘letra pequeña’. Lo contrario es simplemente una ‘tomadura de pelo’ y lo único que se consigue es ‘cabrear’ a los mejores clientes. Eso es, exactamente, lo que la TAP ha hecho conmigo y con otros igualmente sufridos ‘viajeros frecuentes’.
Si lo que pretendían TAP y STAR ALLIANCE ofreciendo tarjetas promocionales de ‘viajero frecuente’ (que en la practica no sirven para nada) era ‘hacerse publicidad’, van camino de conseguir mucha publicidad, pero negativa, muy negativa. Espero que lo noten y tomen buena nota.
(Continuará.../...)
Carlos Barreras González
Abogado y viajero frecuente (y ‘cabreado’) de TAP, aerolínea miembro de STAR ALLIANCE
Parece que el nivel de servicio y de atencion al cliente de air tap portugal está cayendo en picado y hay muchos clientes cabreados. en los blogs hay muchas quejas, como por ejemplo esta http://salvietta.blogspot.com/2006/10/tapeadores.html
. se habla de vuelos de 20 horas convertidos en 48 horas.... umh... eso me suena... por ahí empezó otra compañía que recientemente suspendió vuelos y dejó a más de 100.000 pasajeros en tierra....
no es buena señal que ni los taxistas de Lisboa quieran trabajar con la TAP (eso se dice en el blog y yo lo comprobé personalmente).
A la aerolínea portuguesa TAP le están creciendo los enanos. La pasada semana se suspendieron varios vuelos TAP de Lisboa a Barcelona, Madrid y otras ciudades.
El periodico digital publico.pt explica los motivos en la pagina http://www.publico.clix.pt/shownews.asp?id=1280646.
Al parecer hubo bastantes quejas de viajeros provenientes de varios países que se quedaron 'tirados' en el aeropuerto de Lisboa, a los que la TAP no les había comunicado la cancelación de sus vuelos. Otros clientes 'cabreados' de la TAP.
¿sabeis cual es el problema de la tap? pues que en algunos vuelos no tiene competencia, y eso se nota. Cuando hay competencia, las cosas mejoran mucho para los consumidores. Sin salirnos del tema, baste mencionar la bajada de pantalones (lease tarifas) de los vuelos Lisboa-Barcelona de la TAP cuando empezó a operar Clickair.
A las grandes empresas tenemos que 'educarlas' entre todos: la competencia, los trabajadores, los clientes y los medios de comunicación. Salvo que sus responsables sean muy 'burros' (lo cual por desgracia, y aunque parezca increíble, no es infrecuente) esas empresas 'goliat' suelen aprender, a veces con retraso, pero aprenden.
Hay que ser caritativos con esas empresas, ya lo dijo El Señor: 'Enseñar al que no sabe'.