por pura casualidad visitando la oficina de un cliente he visto sobre una mesa una de mis facturas, pero falsificada. Han debido de escanearla y modificar los importes y conceptos. Creo que debe de ser para reclamar una fianza a un inquilino. La cuantia es pequeña 300 euros. Pero no me hace gracia como es evidente y natural.
Mi pregunta es, ¿que consecuencia puede tener esto si lo quisiera llevar al juzgado? Mi cliente curiosamente es procurador de los tribunales, ¿que podría pasarle laboralmente? Para probar esta falsificacion, ¿tendria que hacerme con esa factura o bastaria con fotografiarla?