Siento discrepar, pero creo que sí que le entendí. Y si su opción es ser práctico, valorar y tragar condescendientemente con lo que hay, la mía es tratar de cambiar lo que es injusto y no me gusta, con firmeza y sin condescendencias.
Creo que no me ha entendido, no pretendí ni pretendo justificar en absoluto la falta de honestidad. Me refiero a que muchas veces hay cosas contra las que no se puede luchar. Le recuerdo que el mísmisimo presidente de la Audiencia Nacional reconoció, hace unos días, que la justicia no es igual para todos. Quienes tienen más medios tienen más posibilidades. Y muchas veces hay que valorar si merece la pena meterse en un pleito o abstenerse. Simplemente me refería a eso. Siento el malentendido. Un saludo.