Saludos a todos, y muchas gracias de antemano por ayudarme. Recurro a su consejo legal para tener una visión inicial sobre como acometer el problema que se me plantea. El caso es el siguiente: Estando en los inicios de una relación de pareja (4 meses) , se ha producido un embarazo no deseado. A pesar de que, en principio, ninguno de los dos queríamos ser padres (en mi caso, nunca, y así se lo había dejado claro desde el principio), y de que ella siempre había manifestado su intención de no tener hijos al menos de momento, ahora parece que su percepción ha cambiado y quiere tenerlo. De nada ha servido, obviamente, mi postura ni el hecho de que lo perciba algo que arruina mi vida. Con independencia de lo justo o no del hecho de ser padre a la fuerza, quería saber el alcance económico que esto me puede suponer, dado que no me considero capaz de renunciar a mis responsabilidades como padre aunque me sienta engañado. La decisión inicial es intentar continuar con la relación de pareja a pesar de este hecho que yo percibo como traumático, pero quería asegurarme, al menos en lo posible, que este hijo no deseado no acabe constituyendo mi ruina económica. Mis ingresos rondan los 1800 euros, con nómina.Acabo de firmar un contrato de arras de venta de mi vivienda habitual con el objeto inicial de adquirir otra. Me quedarían "limpios" unos 100000 euros que pretendía usar como entrada. Pero con todo este asunto la cosa se me complica. No viviamos juntos ni había intención de hacerlo, pero si al final nace el niño, intentaríamos la convivencia en pareja (también quiero saber si este hecho también me puede perjudicar). La cuestión es como proteger mi escaso patrimonio en el caso de que la cosa no vaya bien. Entiendo que sería una locura comprarme una casa y vivir allí, habida cuenta de que sería el hogar familiar. Pero..¿Me puedo blindar de alguna forma? La cuestión es que la chica en cuestión tiene unos ingresos bastante superiores a los míos. Tiene una empresa compuesta únicamente por ella misma, y a través de la cual tampoco factura todos los ingresos de su actividad. El salario que se ha "puesto" es bajo por un tema de tributaciones, por lo visto, y no refleja para nada su nivel real de ingresos. ¿Que puedo hacer para evitar que, además de verme siendo padre sin quererlo en absoluto, pueda salir penosamente escaldado en el plano económico? Diculpen lo extenso del texto y les reitero mi agradecimiento.
En primer lugar, enhorabuena por su futura paternidad , espero que en un futuro cambie su visión para bien y se sienta más feliz con la situación .
En segundo lugar, lo de que venda su vivienda y adquiera otra no parece muy acertado en estos momentos, si lo que busca es cambiar de vivienda, ya que tiene la suya bastante amortizada , yo me decantaría por no vender, alquilar la suya y a su vez buscar un futuro hogar de alquiler que se adapte a sus gustos y necesidades de su nueva situación, así en caso de fracaso usted tendría protegida su propiedad frente a futuras adjudicaciones como " hogar familiar ".
También le recomiendo que sigan ambos con sus profesiones y compartan el cuidado y crianza del bebé.
No se me ocurre una solución mejor , salvo mejor opinión, en estos momentos no se precipite a vender - comprar, alquile, su patrimonio se lo agradecerá ante futuros problemas. Tampoco ha dicho si la mamá tiene vivienda.
Creo q economicamente estais muy bien, podeis criar uno y dos y tres niños de sobra con este patrimonio. Cumplir con tu parte, economicamente lo tendras facil. La otra parte q te toca cumplir como padre, si no quieres renunciar, es la de responsabilidad y la afectiva, q es la mas importante, y esa solo la podras cumplir con el corazon.
Vivir juntos es una opcion, pero no la unica, si lo haceis forzados, puede q no sea la mejor.
Por otra parte, si os habeis quedado embarazados sin quererlo, supongo q los dos, estabais al corriente de q podia pasar. Si ha sido un accidente o un despiste, y ella ha decidido tenerlo, solo te queda una... disfrutarlo!
Muchas gracias por su ayuda. Lamanchega, la cuestión es que la vivienda que tenía en propiedad y que aún no había acabado de pagar estaba situada en otra provincia (en la que viví unos años por motivos de trabajo antes de trasladarme). Así las cosas, tenía que pagar el alquiler aquí y depender de alquilar o no aquella para llegar a fin de mes más o menos tranquilo. Por eso la he "malvendido", era una preocupación constante. Así que nunca podría usarla para vivir, dado que no tengo intención de volver a vivir en dicha provincia. Mi idea era usar el sobrante para dar una entrada de una vivienda en Madrid, donde vivo ahora. La persona a la que he dejado embarazada y que ha cambiado de opinión sobre el hecho de ser madre no tiene vivienda en propiedad, actualmente paga un alquiler de 1000 euros por un piso en un barrio "bien" de Madrid. Por eso comentaba que su nivel de ingresos es superior al mío, a pesar de que su nómina no lo refleje al ser ella su propia empresa y ponerse el salario que le conviene por un tema de tributación. Desconozco cuales son sus ingresos reales (insisto en que la conozco apenas hace cuatro meses), pero supongo que deben rondar los 3000 o 4000 euros. Pero no tiene casa en propiedad. Mi ideal de vida siempre ha sido vivir en el campo, lejos de la gran ciudad, y rodeado de naturaleza y animales. Para nada entraban en esa ecuación los niños, auque dicho así suene fatal. No me gustan, apenas los puedo aguantar 5 minutos...diez en todo caso si se trata de mi sobrino. Por eso digo que tengo una sensación de naufragio absoluto en el plano personal. Pero tampoco soy capaz de desentenderme del asunto, por poco que me gusten los niños ese embrión acabará siendo una persona de la que seré responsable aunque su nacimiento me suponga un trauma. Insisto en que esta opción estaba en principio descartada por la otra parte hasta que ha sucedido. La cuestión es..habida cuenta de que el nivel de ingresos que refleja su nómina es muy inferior al real, y que los míos son obvios por cobrar con una nómina...¿puede perjudicarme el hecho de intentar una convivencia en común en caso de saparación? Me refiero a que, si es un alquiler, pueda pedirme parte de ese alquiler además de la manutención del niño. O si puede demandarme parte de ese dinero que iba a destinar a comprar una vivienda propia. ¿Qué debería hacer con él? En caso de vivir juntos...¿Sería mejor en una casa de alquiler? Igual son miedos infundados, pero sólo de pensar que además de la ruina personal, en un futuro deba afrontar la ruina económica, los miedos me atenazan. Es un debate interno en el que se mezclan aspectos de índole moral, con instinto de supervivencia, con la voluntad de adaptarme e intentar ser medianamente feliz, con la necesidad de blindarme frente a posibles contingencias adversas...De momento sólo soy capaz de ver el futuro con miedo y ese naugragio personal del que hablaba. Pero bueno...soy en parte responsable de mi situación y tengo que apechugar. Muchas gracias.
Hola akela2, en caso de separacion, desconozco hasta quanto te podria pedir, supongo q si las cuentas esran separadas no tienes pq perder la mitad de lo tuyo. Y si la vivienda es de alquiler, cada uno paga la suya, y los gastos del niño a medias. Pero aunque hace poco q la conoces, puedes intuir. Q clase d persona es. Y si estas a gusto con ella ahora mismo, es lo mas importante. Si siempre has deseado vivir en el campo, puede ser una buena opcion alquilar una casa d campo, aunque en tus planes no entrara un niño, este no tiene pq ser una privacion d lo q tu quieras y te guste hacer.
El miedo a lo desconocido desaparece cuando lo conoces, no es lo mismo los niños de los otros q el tuyo. Creo q te sorprenderas. Te aconsejo q te relajes i te deseo mucha suerte
En tu situación y por tus circunstancias, irte a vivir con ella, lo veo una aventura.
Al margen de lo que ya te han dicho (vivienda de alquiler y todo lo demás), yo seguiría viviendo como hasta ahora, tú en tu casa y ella en la suya y si con el tiempo creéis que es buena idea vivir juntos y os apetece de verdad, entonces intentadlo. Podéis mantener la misma relación que hasta ahora con el nuevo factor que se añadirá en breve, colaborando en los gastos que suponga y participando en aquellos actos y decisiones que como padre sea conveniente o necesario.