La edad aceptada por la ley para irse de casa varía según el país y la legislación local. En la mayoría de los lugares, la edad legal para dejar el hogar sin el consentimiento de los padres es de 18 años. Sin embargo, en algunos lugares, como en Estados Unidos, la edad legal puede variar de estado a estado. Es importante consultar la legislación local para determinar la edad específica en la que se puede irse de casa sin el consentimiento de los padres.