urbanísticamente, no hay distancia mínima
tampoco en cuanto a normativa de tráfico, más allá de la prudencia y la previsión exigibles
hay muchas calles, fundamentalmente en cascos históricos y núcleos rurales, en los que el ancho de calle es del orden del ancho de un coche ... y tanto conductores como peatones han de extremar las precauciones, los primeros en la atención y velocidad especialmente moderada, y los segundos en mirar antes de salir