Buenas a todos compañeros, soy un estudiante de 5º de la penúltima promoción de licenciatura de derecho.
Bien la madre de una amiga ha tenido un problema y me la ha planteado pero me queda mucha práctica para dar solución asique he decidido consultarlos.
Hace un par de años, la madre de mi amiga pidió 1000 euros a una amigo suya sin mediar documento ni prueba, esto es sin que quedara constancia de ello. hace un par de meses (una vez deteriorada la relación entre ellas) le ha venido reclamando este dinero; le ha devuelto unos 150 y le quedan sobre 850 por pagarle.
Ambas trabajan en una misma cadena de supermercados aunque en supermercados distintos en la misma ciudad; la amiga acreedora la está lanzando amenazas telefónicas de que o le devuelve la cantidad restante o irá al supermercado de la deudora a "dejarla en ridículo" en sus palabras textuales, por lo que yo entiendo vejaciones y demás.
Este es el caso, yo he sacado varias conclusiones ya, aunque me gustaría poderlas debatir con vosotros.
Un saludo y gracias por anticipado a todo el que gaste 5 minutos en leer el caso y dar su opinión jurídica.
segun mi opinion la deuda no se puede demostrar al no haber documentación escrita que la avale, asi que si la que amenaza quiere cobrar no tendrá mas remedio que tener paciencia y esperar a que la mujer pueda pagarle.
Lo de montarle el espectaculo en el trabajo con llamar al de seguridad y que se la lleve asunto arreglado, aparte de que depende de los insultos que le haga puede ser delito.
Yo aquí veo dos temas distintos:
1) La deuda. La deuda existe y de hecho ya se ha pagado una parte. Nada impide a la acreedora demandar la cantidad restante y sin pruebas será la palabra de la acreedora contra la deudora. Uno se pone muy nervioso en juicio y no sería la primera vez que el deudor confiesa que debe 850, 2,000 y que además mató a Manolete.
2) El tema de las posibles coacciones, que si se pone muy mal podría ser objeto de denuncia penal.
Mi consejo, para intentar evitar problemas mayores, sería el siguiente: que la deudora ofrezca a la acreedora firmar un reconocimiento de deuda (privado) y pagar poco a poco, lo que pueda mensualmente. Así la acreedora debería quedarse contenta y la deudora puede cumplir su obligación poco a poco y mientras vaya pagando la otra no la puede demandar, ni acosar.
Es un consejo.