Tuve un negocio, los dos ultimos años acumulé 15.900 euros con un proveedor concreto.
Contrató una empresa de recobros, aunque el me manifiesta que me conoce y me espera, la empresa según el le obligó a cobrar toda su cartera.
Entiendo a mi proveedor, es mas, le agradezco la paciencia, y mi objetivo es pagarle.
Sin embargo la empresa de recobros ya va por 17.900 euros de deuda, según ellos.
Y no aceptan mi voluntad de pago para ganar tiempo hasta que mi situación mejore.
Me amenazan con duplicar mi deuda.
Por favor, quisiera ayuda para saber si me interesa ir a Juicio y que el Juez sea quien con la ley en la mano vea que opciones tengo.
Actualmente trabajo a media jornada, gano lo justo que pago de hipoteca, no tengo bienes, solo una casa hipotecada con 80.000 euros, vivo de mi pareja y mi madre...
Siento la parrafada, agradezco mucho su ayuda, un cordial saludo.
Aunque tenga vd. voluntad de pagar, mientras no lo haga la deuda generará intereses. Lo que la ley no permite es que sean abusivos, lo que no parece en su caso: si los 2000 euros se han generado en unos 2 años por una deuda de 15.900 euros, resulta un interés más o menos entre el 7 y el 8 % dependiendo de los vencimientos de cada factura...
El tipo de interes de demora para operaciones comerciales lo fija el Banco de España, siendo para 2014 del 8,15% y para 2015 y 2016 del 8,05%.
En resumen, a falta de más datos parece a simple vista que los intereses que le reclaman son correcto.
- El sueldo tiene unos mínimos inembargables, por ahí no se preocupe demasiado.
- La vivienda tiene una hipoteca de 80.000 euros , pero si su valor es superior le podrán embargar la diferencia. Si es ese el caso, es mejor venderla y liquidar hipoteca y deudas y que aun le sobre dinero, que esperar a embargo y subasta donde seguramente se obtendrá menos que con la venta.
Está usted hablando de embargos, cuando todavía no hay más que un montón de facturas encima de la mesa. Espere a ser demandado, defiéndase. En el caso de que perdiese el juicio, recurra. Si pierde el recurso, espere a pelear el embargo. Quizás ni siquiera le demanden y se limiten a hostigarle mediante comunicación personal. Puede, en fin, que hasta las facturas estén prescritas o que haya mejorado usted fortuna. No piense todavía en el embargo, y tenga en cuenta que las deudas se pagan todas o ninguna, porque un impagado devorará el patrimonio que está al día.