Creo que este es el foro adecuado. Pido disculpas si no es así.
Simplemente quiero saber cuál sería la mejor opción para comprar una casa (en la playa) y poner a mi hijo (de 2 años) de dueño de esa casa. Yo la pagaría mediante hipoteca, y no puede estar a mi nombre más del tiempo necesario, a ser posible ninguno (estoy divorciado, pagando otra casa y no quiero tener ningún tipo de propiedad propicia a saldar deudas con mi ex-pareja).
Buscando he visto estos 4 posibles casos:
1.- Llevar a cabo la compra de la vivienda por mi parte, incluida la hipoteca, y posteriormente donársela a sus hijos.
2.- Comprar la casa determinando en la escritura de compra-venta que tengo el usufructo vitalicio sobre la vivienda y mi hijo la propiedad.
3.- Donar el dinero a mi hijo y que sea él quien efectúe la compra.
4.- Comprar la vivienda y que mi hijo la herede una vez fallezca.
Con la condiciones que establezco las opciones 3 y 4 no son viables por mi parte, y entre la 1 y la 2 me gustaría saber lo bueno y lo malo de cada una de ellas y cuál es mejor a efectos fiscales, si me hacéis el favor.
El hecho de que haya una hipoteca pone de manifiesto que hay una tercera parte interesada, el banco, con la cual hay que contar principalmente. La constitución de usufructo no es posible en ningún caso, porque para ello tiene que firmar el propietario de la casa, es decir, dentro de 16 años, por lo que todo parece indicar que tendrá usted la casa a su nombre, a no ser que el banco le permita que el titular de la vivienda sea su hijo y que la hipoteca esté a nombre de usted. Dentro de 16 años pídale modestamente la constitución de usufructo vitalicio, apercibiéndole que lleva todo ese tiempo pagando la hipoteca usted solo. Rechace donaciones como ingeniería patrimonial; la donación es un premio que se le da a alguien para beneficiarlo especialmente, y no un mecanismo de elusión de responsabilidades.