Hola:
trabajo como funcionario desde hace 20 años en una administración local, y ahora nos quieren cambiar el nombre del puesto por otro que comparten compañeros de otros departamentos, bajo el pretexto de que así nos será más fácil concursar a otras plazas con el mismo nombre.
Esa golosina que a mis compañeros les resulta muy apetecible a mí me despierta un resquemor; me temo que al cambiarnos de nombre lo que pretenden conseguir es que durante el verano suplamos las vacaciones de otros departamentos sin posibilidad de protesta al tener la misma denominación y amparándose en el art. 81 del Estatuto Básico del Empleado Público que habla de movilidad por necesidades del servicio.
Esta situación me parece un regalo envenenado. ¿Puedo oponerme a ese cambio de denominación de la plaza? ¿ Y al traslado a otro puesto para hacer las vacaciones de otros?
Gracias.
Necesitaremos conocer con más detalle su caso.
No obstante, le recomendamos que no se niegue para evitarle problemas.
Otra cuestión, es que tan pronto como la administración local lo haya determinado, estudiemos la posibilidad de impugnar ese acto.
Si lo desea puede contactar con nosotros.
Un saludo