Debido a las difi cultades familiares,
algunos inmigrantes que habían reagrupado
a su familia no han tenido
más remedio que volver a enviar de
forma temporal a sus hijos a su país.
Ahora, esta decisión puede acarrearles
un problema si les toca renovar
los papeles, ya que el nuevo Reglamento
de Extranjería, en vigor desde
hace menos de un mes, exige acreditar
la escolarización de esos menores
a su cargo.
Esta novedad puede convertirse
en un motivo más de irregularidad
sobrevenida, tanto para los menores
como para sus progenitores.
“Hemos encontrado ya varios casos
en nuestras ofi cinas. Sobre todo,
de marroquíes y de senegaleses, y
teniendo en cuenta que las renovaciones
que ha habido en estos 20
días han sido muy pocas, creemos
que puede deberse a este nuevo requisito”,
afi rma Ghassan Saliba, responsable
de Inmigración de CCOO en
Catalunya.
Por eso, desde este sindicato exigen
una “moratoria de cuatro o cinco
meses, para que la gente esté informada”.
“Así, los padres pueden decidir qué
opción es mejor para ellos y sus hijos,
si volver a traerlos o que se queden
allí y dar de baja la tarjeta de residencia
de sus hijos”, explica Saliba.
Además, según este portavoz
sindical, todavía no está muy claro
en qué consiste exactamente este
certifi cado: si únicamente se basará
en la matriculación del menor en la
escuela o también en un informe de
asistencia.
“¿Qué pasaría si el niño es rebelde
y no acude a clase? ¿Sancionarían entonces
con la denegación de la renovación
a los padres?”, plantea en este
sentido Olga Hernández de Paz, presidenta
de la Asociación Catalana de
Profesionales de Extranjería (ACPE).
Fuentes de la Secretaría de Inmigración
y Emigración aseguran a Sí
que “la aportación de ese certifi cado
pasará por que el menor esté escolarizado
en España, algo que parece obvio
si se dice que es residente aquí”.
Teniendo en cuenta que la decisión
que lleva a estas familias a enviar a
sus hijos a sus países es precisamente
te intentar superar la crisis con menos
cargas económicas, por su naturaleza
se trata de algo temporal.
“Si cancelasen el permiso de residencia
de sus hijos, cuando quisieran
traerlos tendrían que comenzar un
nuevo proceso de reagrupación, lo
que sería volver a empezar de cero”,
explica Hernández.
Mayor fl exibilidad
“Costó mucho a las familias conseguir
hacer la reagrupación familiar
en su día. Por eso ahora, cuando
envían a sus hijos temporalmente a
sus países, tienen miedo de decirlo
a la Administración, ya que automáticamente
perderían su permiso de
residencia”, explica Saliba.
“La Administración tendría que ser
más fl exible por el bien de los menores”,
asegura el portavoz de CCOO.
Por eso, desde este sindicato proponen
que “no les quiten el permiso,
sino que se lo congelen, es decir, crear
como una recuperación de la reagrupación
familiar, como existe con la recuperación
de la nacionalidad”.
Desde la Secretaría de Inmigración
argumentan que esta medida “busca
impedir el absentismo escolar en España”,
y aseguran que “el Reglamento
prevé la posibilidad de conceder
una segunda oportunidad al ciudadano
que renueva, para que presente
el certifi cado de escolarización”.
Esta segunda oportunidad consiste
en un plazo de un mes para presentar
el certifi cado.