Estuve recibiendo, llamadas a ni teléfono fijo nocturnas, con número oculto.
Entre la 1, y las 3 de la madrugada, lo denuncie en la guardia civil, ya que mi mujer estaba muy asustada y nos despertaba cada noche. Yo tengo turnos y trabajo algunas noches quedando mi mujer sola, que era cuando mas la llamaba.
Este personaje no decía nada simplemente nos molestaba e impedía dormir. Dejaba sonar 2 o 3 timbradas y colgaba ya que en la cuarta saltaba el contestador y le cobrarían.
Yo sospechaba de una persona en mi trabajo ya que lo tenia bajo mi mando y le hice varios informes a mi superiores quejándome de su forma de trabajar.
Al tener yo las sospechas de este elemento me dijeron como localizarlo. Lo hice y lo pille. Lo he denunciado con nombre y DNI, y la forma de localizarlo ya que lo tenia difícil para solicitar un pinchazo de su móvil, al no haber amenazas no hay delito, pero si meter miedo a una mujer que el llamante sabia perfectamente se encontraba sola y en una casa en el campo sin vecinos cercanos.
Mi pregunta es ¿cuando salga el juicio de faltas, el juez, admitirá la forma de pillar al llamante y darlo como prueba suficiente para acusarlo de los hechos?
¿Y cuál ha sido esa forma de "pillarlo", si se puede saber?. No sé si habrá hecho Ud. algo ilegal, pero lo importante será que pueda probar que esa persona era la que realizaba las llamadas y que lo hacía con el propósito de molestar. Lo digo porque a veces esas llamadas se deben a un error, cuando alguien piensa que está enviando un fax, y por las diferencias horarias las llamadas se producen a horas intempestivas.
Permanecí despierto con mi móvil en la mano y con el número de teléfono, del presunto llamante, esperando la llamada nocturna. Sobre las 2:57 horas, empieza a sonar mi teléfono-fijo, con llamada oculta, realizo llamada con mi móvil al número de teléfono de la persona que sospecho, se cruza con la llamada del él. Al tener, su teléfono ocupado, (realizando su llamada, a mi teléfono), “comunica”, cuando cuelga (siempre dejaba sonar, dos o tres timbradas y colgaba, sabia que a la cuarta timbrada saltaba el contestador y le facturaría su compañía) entra mi llamada, al verse sorprendido o desconcertado que le estaba entrando una llamada, “cuelga”. Rápidamente le vuelvo a llamar, (esto es las 3:00 de la madrugada) que esta vez si descuelga y escucha, no dice nada, “cuelga”, dejándome con la palabra en la boca, al querer decirle que sabia quien era. Cuando vuelvo a llamarle, lo tiene desconectado.
Desde ese día no volvió a llamarme.
Cuando le increpe a decirle lo que me estaba haciendo me contesta:
” Haz lo que tengas que hacer. Eso no es delito, porque no hay amenazas”