http://www.adn.es/lavida/20100419/NWS-1778-Absuelven-violencia-denuncia-critican-acusado.html
EFE
El Juzgado de lo Penal número Cuatro de Murcia, en una sentencia a la que ha tenido acceso Efe, ha absuelto a un hombre para quien su esposa solicitó tres años de cárcel por dos delitos de malos tratos y un delito de violencia física y psíquica, y ha lamentado que ésta lo denunciara sin pruebas.
La titular del Juzgado, la magistrada María Poza, afirma en su sentencia absolutoria que "es de lamentar el efecto pernicioso que denuncias como la que inició este procedimiento producen en el sistema penal, desviando recursos escasos de la atención a los casos de verdadero maltrato".
Indica el Juzgado que la mujer, A.P., casada con su esposo desde hace más de treinta años y con quien ha tenido tres hijas, lo denunció en diciembre de 2008 por maltrato y amenazas, "lo que no ha quedado probado".
Al desmontar todo el contenido de la denuncia, la sentencia rechaza que la denunciante hubiese estado "secuestrada" por su marido, y considera no creíble "que se encontrara ni siquiera intimidada por el acusado hasta el punto de ser anulada por aquél, como reiteradamente han manifestado tanto ella como sus hijas".
La sentencia añade que "la esposa, como auxiliar de clínica, ha trabajado durante todo su matrimonio en jornada completa, era titular de las mismas cuentas que su marido, y éste le entregaba en mano su sueldo, antes de su jubilación".
En la sentencia se dice que la mujer "tenía su propio vehículo, no poseía móvil por decisión propia, y durante los últimos años viajó sola a Burgos a unos ejercicios espirituales, y en junio de 2008, también sola, hizo el Camino de Santiago y se fue de vacaciones con sus hijas ese verano".
"No recuerda, sospechosamente, que en esos meses vaciara la cuenta común con su marido, abriera otra con una de sus hijas y le pidiera a aquél 500 euros".
"Pese al temor que aseguraba tener, añade la sentencia, en septiembre de 2008 se fue, siempre sin su familia, a Jerusalén diez días, sin decirle al acusado dónde iba, y se ha mostrado desafiante, en una expresión que la intermediación ha permitido percibir como incompatible con la situación de temor que se alega".