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Absuelto un hombre que pegó a su mujer para 'calmarla' porque estaba 'histérica'
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Absuelto un hombre que pegó a su mujer para 'calmarla' porque estaba 'histérica'
http://www.elmundo.es/elmundo/2009/03/18/valencia/1237371549.html
'No se ha probado que la agresión responda a una discriminación'
La víctima apoyó a su marido y declaró que nunca antes la había golpeado
A. S. Mollá | Alicante
Actualizado miércoles 18/03/2009 11:19 horas
Si usted abofetea a su pareja con buena intención, puede estar tranquilo. No es un delito. O al menos eso es lo que refleja una sentencia de la Audiencia Provincial de Alicante, que ha absuelto de maltrato a un hombre que le dio una bofetada a su mujer "para que se calmara". La agresión se produjo en el transcurso de una discusión. Tras el cachete, ella retrocedió para sentarse en la cama y, casualmente, tropezó, cayó al suelo y se golpeó con la mesilla en el ojo izquierdo.
Un juzgado de lo penal de Alicante condenó a este hombre por malos tratos a 20 días de trabajos en beneficio de la comunidad y le impuso una orden de alejamiento de su esposa con una vigencia de seis meses. Ahora, la Audiencia de Alicante ha revocado esta sentencia al considerar que el condenado no tenía la intención "de menoscabar la integridad física de la mujer". O lo que es lo mismo, apoya la versión del acusado: le pegó porque estaba "histérica" y necesitaba tranquilizarse. Una explicación que incluso corroboró la propia víctima, quien declaró en el juicio que había perdido los papeles y que creía que su marido le había propinado un cachete "para que entrara en razón".
La resolución de la Audiencia considera que, para que "un acto de violencia" constituya "un delito de lesiones o maltrato" es necesario, "aparte de un elemento objetivo, otro subjetivo o intencional (...) que viene caracterizado por ser manifestación de la discriminación, la situación de desigualdad y las relaciones de poder de los hombres sobre las mujeres". Según el tribunal, en este caso no ha quedado probado este "elemento intencional".
El desencadenante de la agresión fue una discusión entre el matrimonio. La víctima padece la enfermedad de Corea –más conocida como el baile de San Vito–, que le provoca movimientos descontrolados en los brazos y las piernas.
Por eso le había pedido a su marido en numerosas ocasiones que realizara obras en su vivienda para adaptarla a sus necesidades y que ella pudiera salir a la calle "por sus propios medios". Sin embargo, para esto era necesario el permiso de la comunidad de propietarios, que el marido todavía no había conseguido. Por este motivo, la víctima empezó a increparle y a echarle en cara que aún no hubiese realizado las obras.
El enfrentamiento verbal fue subiendo de tono y la mujer, según el testimonio del procesado, se puso "histérica" y empezó a lanzarle objetos. Fue en ese momento cuando, tal como declaró, no vio otra solución que darle una bofetada "para que se calmara".
Ella se echó a llorar, fue a sentarse en la cama y se cayó, golpeándose el ojo izquierdo con la mesilla de noche. Durante el juicio, la mujer apoyó la versión de su esposo en todo momento y, además, justificó su comportamiento. Dijo que él le pegó "para que entrara en razón". También defendió a su esposo argumentando que después la había llevado al ambulatorio y que anteriormente nunca la había golpeado.
La Fiscalía estimó que estos hechos eran constitutivos de un delito de maltrato familiar y pidió una pena de ocho meses de prisión. Finalmente, la juez le condenó sólo a 20 días de trabajo en beneficio de la comunidad al estimar la atenuante de dilaciones indebidas. Y es que desde que el juzgado de instrucción ordenó enviar la causa a un penal para celebrar el juicio hasta que se recibió pasaron casi dos años.
'No se ha probado que la agresión responda a una discriminación'
La víctima apoyó a su marido y declaró que nunca antes la había golpeado
A. S. Mollá | Alicante
Actualizado miércoles 18/03/2009 11:19 horas
Si usted abofetea a su pareja con buena intención, puede estar tranquilo. No es un delito. O al menos eso es lo que refleja una sentencia de la Audiencia Provincial de Alicante, que ha absuelto de maltrato a un hombre que le dio una bofetada a su mujer "para que se calmara". La agresión se produjo en el transcurso de una discusión. Tras el cachete, ella retrocedió para sentarse en la cama y, casualmente, tropezó, cayó al suelo y se golpeó con la mesilla en el ojo izquierdo.
Un juzgado de lo penal de Alicante condenó a este hombre por malos tratos a 20 días de trabajos en beneficio de la comunidad y le impuso una orden de alejamiento de su esposa con una vigencia de seis meses. Ahora, la Audiencia de Alicante ha revocado esta sentencia al considerar que el condenado no tenía la intención "de menoscabar la integridad física de la mujer". O lo que es lo mismo, apoya la versión del acusado: le pegó porque estaba "histérica" y necesitaba tranquilizarse. Una explicación que incluso corroboró la propia víctima, quien declaró en el juicio que había perdido los papeles y que creía que su marido le había propinado un cachete "para que entrara en razón".
La resolución de la Audiencia considera que, para que "un acto de violencia" constituya "un delito de lesiones o maltrato" es necesario, "aparte de un elemento objetivo, otro subjetivo o intencional (...) que viene caracterizado por ser manifestación de la discriminación, la situación de desigualdad y las relaciones de poder de los hombres sobre las mujeres". Según el tribunal, en este caso no ha quedado probado este "elemento intencional".
El desencadenante de la agresión fue una discusión entre el matrimonio. La víctima padece la enfermedad de Corea –más conocida como el baile de San Vito–, que le provoca movimientos descontrolados en los brazos y las piernas.
Por eso le había pedido a su marido en numerosas ocasiones que realizara obras en su vivienda para adaptarla a sus necesidades y que ella pudiera salir a la calle "por sus propios medios". Sin embargo, para esto era necesario el permiso de la comunidad de propietarios, que el marido todavía no había conseguido. Por este motivo, la víctima empezó a increparle y a echarle en cara que aún no hubiese realizado las obras.
El enfrentamiento verbal fue subiendo de tono y la mujer, según el testimonio del procesado, se puso "histérica" y empezó a lanzarle objetos. Fue en ese momento cuando, tal como declaró, no vio otra solución que darle una bofetada "para que se calmara".
Ella se echó a llorar, fue a sentarse en la cama y se cayó, golpeándose el ojo izquierdo con la mesilla de noche. Durante el juicio, la mujer apoyó la versión de su esposo en todo momento y, además, justificó su comportamiento. Dijo que él le pegó "para que entrara en razón". También defendió a su esposo argumentando que después la había llevado al ambulatorio y que anteriormente nunca la había golpeado.
La Fiscalía estimó que estos hechos eran constitutivos de un delito de maltrato familiar y pidió una pena de ocho meses de prisión. Finalmente, la juez le condenó sólo a 20 días de trabajo en beneficio de la comunidad al estimar la atenuante de dilaciones indebidas. Y es que desde que el juzgado de instrucción ordenó enviar la causa a un penal para celebrar el juicio hasta que se recibió pasaron casi dos años.
