Irán desafía a la ONU y anuncia la producción de uranio a gran escala
Irán ha vuelto a desafiar a las Naciones Unidas anunciando a través de su presidente, Mahmud Ahmadineyad, y coincidiendo con el aniversario del primer enriquecimiento de uranio con éxito en Irán, que la República islámica es capaz de producir energía nuclear "a escala industrial". En un discurso pronunciado en la ciudad de Natanz, que alberga la única planta nuclear del país, Ahmadineyad declaró que "con gran honor" podía informar de que actualmente su "querido país se ha unido al club nuclear de las naciones capaces de producir energía nuclear a escala industrial", puesto que ya tiene activas 3.000 centrifugadoras para llevar a cabo el proceso de enriquecimiento de uranio, 2.600 más de las que le constaban a Naciones Unidas.
Este anuncio supone un nuevo desafío a la comunidad internacional, ya que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, 15 días antes del mismo exigió a Irán la suspensión de sus actividades de enriquecimiento de uranio..
A pesar de este anuncio, el mandatario iraní no se desmarcó de sus múltiples declaraciones sobre el programa nuclear afirmando que la puerta para las negociaciones con Occidente "continúa abierta" y manifestando que "Irán da la bienvenida a cualquier sugerencia y diálogo para resolver esta cuestión".
Ahmadineyad insiste, a pesar de lo anterior, en que Irán ha colaborado con los observadores de Naciones Unidas, permitiendo la inspección y todas las facilidades para ello, pero advirtió en referencia a la amenaza de que se incremente la aplicación de nuevas sanciones por parte de Naciones Unidas que la ONU no debe hacer nadaque provoque que su gran nación ( Irán) reconsidere su política".
Desde el Gobierno Iraní se ha asegurado que Irán tiene la voluntad de ofrecer garantías de que su programa nuclear sólo tiene fines pacíficos pero, dejando claro, no obstante que Occidente debe aceptarlo como un hecho.
Por su parte, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas ha impuesto sanciones limitadas a Irán hasta que suspenda el proceso de enriquecimiento de uranio, mediante el cual se puede producir combustible para un reactor nuclear o la base para un arma nuclear. Estados Unidos y sus aliados acusan a la República islámica de los ayatolás de querer construir armas nucleares, algo que Irán niega.
Respondiendo al Gobierno iraní, el Departamento de Estado norteamericano lamentó que el país islámico haya desaprovechado una "oportunidad" para congraciarse con la comunidad internacional. Su portavoz, Sean McCormack, subrayó que se trata "de una oportunidad perdida" la que, a su juicio, ha sido desaprovechada por el Ejecutivo iraní para cumplir con las exigencias que el Consejo de Seguridad le había impuesto.
Asimismo la posición unánime de la UE es que Irán debe apoyar la resolución de la ONU y cumplir con los requisitos para poder volver a la mesa de negociaciones.