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Soy la "otra".

65 Comentarios
Viendo 61 - 65 de 65 comentarios
11/01/2010 23:29
cicutrina esto lo has escrito tú.

"Cathy, tranquila, no me enfado, mi hijo tiene camino de 12 años y me ha dicho que no quiere ver a su padre porque le molesta la presencia de su pareja. ¿Le tengo que obligar? Monta cada pataleta... "

Por lo que veo estas haciendo lo que te molesta que te hagan a ti.

Creo que Espartaco y tú sois un par de cinicos.
11/01/2010 21:47
tranquila, pasa de ella,
mira yo me encontre a mi ex con un tio en casa y nos separamos.
conoci a la que es hoy en dia mi mujer y comenzamos a salir a los pocos meses de la separacion.
ni tan siquiera nos dimos un beso hasta el dia que firme el divorcio por respeto.
pero resulta que segun mi ex y sus amigos, a lo que habia contado la historia al reves, mi mujer actual era una puta (no lo decia asi pero lo daba a entender)
y me decia que:
verguenza me tenia que dar por ir con una mujer por la calle.
sabe que?
pasado el tiempo claro que me da verguenza haber ido por la calle con una mujer.
pero no con mi actual esposa precisamente.

un saludo
11/01/2010 21:03
Cicutrina, cuantas más denuncias archivadas mejor. Más piedras se tira contra sí misma mucho mejor. Al final el tiempo pone todo en su lugar, déjala que actúe que cuanto más actúe mayor va a ser la costalada. Mi recomendación... lo que estás haciendo: indiferencia, cabeza fría, seguridad en tí misma y dejar que se describa con sus propios actos y sus propias palabras... Y por favor... no te describas como "esa" pues lo que digamos aunque sea en broma son palabras que instalamos en nuestro pensamiento y en algún momento de tanto usarlo puede llegar a instalarse como creencia.

Pues eso: cabeza alta, confianza en la vida y en tí misma, y ver un poquito la realidad desde fuera, pues lo que hay es un enfado morrocotudo con que la dejaran y encima y "lo peor"!! que la dejaran porque prefería tu pareja la soledad a estar con ella!! ya que estaba solo no?, posteriormente al poner la denuncia, se dio la evidencia de "de parte de quien está tu pareja" y más cabreo todavía... hay una inseguridad tremenda por su parte y un pensamiento limitante de qué será de mí... que haré sin esta persona....

En fin... lo de siempre: ni contigo ni sin tí tienen mis males remedio.

La clave: mirar detrás de la actitud para darse uno cuenta de los sentimientos de miedo, enfado o inseguridad que hay tras todas esas mezquindades, es mi remedio en los peores momentos y funciona!!

Saludos y mucho ánimo.
11/01/2010 20:26
Gracias Miguelraul, he escrito porque Espartaco me dijo que leyera una contestación tuya.
Sinceramente creo que tu lo has pasado muy mal, hablas con conocimiento pero con ira y eso, querido amigo, es muy malo porque no nos deja vivir. Yo lo estoy pasando mal pero lo paso peor de ver a mi pareja. Y es cierto que a veces hay que aprender a apretar los dientes para no comerse a nadie. Es lo que nos ha tocado.
11/01/2010 20:18
De ignorancia-supina, así es el 50% de las mujeres, son leonas-despiadadas-letales, pero hay que pensar muy en serio:

1º) ¿ Hay negocio-pasta, detrás de todas estas/nuestras tragedias ?............ SI .

2º) ¿ Quien se lleva la pasta ?...... El equivalente al Ministerio de Trabajo, cientos de miles de millones de Euros.... NUESTROS.... Y CON NUESTRAS TRAGEDIAS Y DESGRACIAS......... L@s parásitos.

3º) ¿ Parásit@s, donde están, quienes son ?.........Dónde está el insecticida ?......

Cicutrina, ya sabes, clásico caso de VIOLENCIA FEMINISTA.......... El debate, queda abierto.

Prohibido, comisarias y demás......... Gracias......

Da recuerdos, a Espartaco, y te repito: tienes que ser de acero, yo la lo he pasado 3 veces...

Un beso.
Soy la "otra".
11/01/2010 19:14
Buenas tardes compañer@s de foro. Lo que voy a relatar es la otra cara, que apenas se menciona pero la hay, de la VIOLENCIA DE GÉNERO FEMINAZI. Cabe destacar antes de que saquéis conclusiones que soy mujer y que en ningún momento quiero generalizar, pues de todo hay en la viña del señor, como aquel que dice.

"YO SOY ESA", esa fulana, esa guarra, esa pérfida inmoral que se está acostando con uno de esos tantos ex-maridos "malísimos" que están siendo vejados por sus ex-mujeres. ¿Mi delito? Estar enamorada de mi pareja.
Ahora resulta que si hay un hombre que está separado y que tiene una ex de las que se dan golpes en el pecho y un hijo no puedes reanudar una relación con él, porque automáticamente te clasifican, su ex y esas mujeres del entorno que predican en alto su calidad moral, en una anarquista descerebrada que no respeta las normas de lo "exclusivamente correcto".
Quiero contar mi historia porque a raíz de vivirla me he dado cuenta de que algunas personas, sobre todo mujeres, aún viven en la edad de piedra y tienen una mentalidad retrógrada.
Mi pareja se separó de su hoy ya ex-mujer y se fue a vivir a un pueblo. Meses después le conocí por casualidades de la vida y nos enamoramos. Decidimos iniciar una relación sentimental.
Al mes de estar viendo a esta persona comencé a recibir llamadas al móvil a altas horas de la madrugada desde un número desconocido. Cuando contestaba nadie hablaba al otro lado. Se quedaban escuchando.
Yo, aún, ni podía imaginar que era la ex-mujer de mi pareja, por lo que no hacía el más mínimo caso. Terminé por apagar el móvil por las noches.
Como dicen, no hay mayor desprecio que no hacer aprecio. Y eso le dolió tanto a esta señora que pasó a llamarme a cualquier hora del día; pero ya no se conformaba con no hablar sino que hablaba. Me decía que había roto una familia, que era una fulana, que me iba a buscar la ruina, que no iba a parar hasta que no me viera viviendo debajo de un puente, que qué era lo que hacía con SU marido.
Bajo mi asombro decidí contarle los acontecimientos a mi pareja, tan solo por mantenerle al tanto. Miles de veces habló con ella para que entrara en razón pero no lo consiguió.
Cabe destacar que me fui a vivir con mi pareja a su pueblo, casa que había sido segunda vivienda de su ex-mujer dentro del matrimonio. Por lo tanto esta señora conocía a la gente del pueblo.
Hinchada de ira al ver que pasaba el tiempo y no conseguía provocarme, comenzó a llamar a los amigos que tenía en el pueblo para que me increparan. Tanto fue el efecto sobre ellos (ella contaba una versión un tanto distinta, os podéis imaginar) que los vecinos, además retirarme el saludo, me rallaron el coche y me lo llenaron de huevos. QUE MALA SOY POR DIOS.
No contenta con eso, esta mujer investigó tanto sobre mi (usurpando el correo de su ex-marido) que consiguió saber dónde trabajaba, donde vivían mis padres y quiénes eran. Y comenzó a amenazarme con hacer daño a mi familia si no dejaba a SU marido.
Y yo, harta de que esta señora actuara de este modo, decidí ponerle una denuncia en la comisaría. QUE ERROR TAN GRANDE MADRECITA.
Ahí empezó el calvario que mi pareja y yo llevamos arrastrando casi dos años.
Ella llamó a mi pareja para decirle que NOS ÍBAMOS A ENTERAR por haberla denunciado ¡a ella! já, faltaría más...
La primera denuncia que recibimos fue hacia mi pareja por malos tratos. Según esta señora él la había cogido del cuello y le había dicho que iba a acabar como las que salen en la televisión. DESESTIMADA.
La segunda denuncia, al ver que esta no le había salido bien, fue a los dos meses, argumentando que mi pareja y yo habíamos colgado sus datos y sus fotos en una página de internet de intercambio de parejas. DESESTIMADA.
La tercera denuncia, dentro ya de la ira que esta situación le provocaba, trataba de una carta con amenazas. Ella misma escribió la carta diciéndose de todo y la presentó en el juzgado diciendo que estaba horrorizada de este hombre y quería orden de alejamiento. DESESTIMADA.
Hoy por hoy, esta señora, al ver que no ha podido meternos en el calabozo, juega sus cartas con el hijo que tienen en común. El niño no quiere ver a su padre porque ella le ha contado que es un monstruo que les abandonó por otra.
Y yo soy la otra. La que tiene que tener paciencia con esa señora para no pegarle una paliza (porque desde luego se la merece). La que tiene que aguantar las malas caras del niño cuando me ve. La que tiene que estar perfecta de ánimo cuando a mi pareja le pega un bajón porque no aguanta más.
La que se marcha de casa porque viene el niño el fin de semana y es mejor que no me vea. La otra, la fulana, la "destroza familias".
Por favor, abramos los ojos, hay un porcentaje de mujeres (al igual que de hombres) que son BASURA y, perdonen que no entienda ese comportamiento. Los fracasos con nuestras parejas no son culpa de nadie. Son culpa de uno mismo y de sus circunstancias. Echar la culpa a los demás es símbolo de ignorancia.