Tengo un bebé que nacio en diciembre y en enero comenzaron unas obras bastante grandes justo en la acera de enfrente de mi casa, concretamente un colegio grande.
Los ruidos han ido en aumento y por supuesto fines de semana incluidos. El bebé se despierta con golpes y ruidos de gruas, no se despierta porque ya no necesite seguir durmiendo, por lo que al poco tiempo comienza a llorar por falta de sueño. Intentamos dormirlo pero se muestra muy alterado y cuando conseguimos que se duerma no lo hace profundo y rapidamente se vuelve a despertar por los ruidos.
Tenemos que cerrar las ventanas y poner el aire acondicionado, por lo que las facturas de luz están siendo impresionantes. Además, incluso con las ventanas cerradas el ruido es ensordecedor.
He estado leyendo sobre como afecta el ruido en los niños y bebés y son bastantes y graves los perjuicios que les ocasionan.
Muchas veces lo hemos dicho. En este caso avisar a los municipales que verifiquen los decibelios, las veces y días que sean necesarios. Cuando más mediciones sonoras positivas mejor, antes tomarán las medidas oportunas, como puede ser el realojo temporal hasta que cese la obra.
La ley del ruido, y el reglamento que la desarrolla, exime a las obras del cumplimiento de los límites de emisión, limitándose a que sólo sean los necesarios.
No veo que la Administración se preocupe de realojar a todos los afectados por obras
no, no he dcho eso, sino que he dicho sólo lo necesario
si las obras empezaron en enero, intuyo que el ruido no sigue en aumento, y se corresponde con operaciones de carga y descarga (puede hacerse más silenciosa) y con las alarmas de la maquinaria en movimiento (camiones, gruas, etc)
tendrás diferente grado de apoyo normativo según cuál sea la comunidad autónoma, y debieras de tener éxito en la exigencia de amortiguación de ruidos evitables, pero mal lo veo respecto a las alarmas de la maquinaria en movimiento
y no tengas en cuenta lo que he dicho si lo crees inconveniente