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Nosotros, la asociación (ONG) Oficina del defensor del Hombre y sus Hijos, no hablamos de casos aislados de maltrato de la mujer al hombre. Hablamos de las estadísticas que obtenemos con el goteo de datos que nos entran a través de llamadas o correos electrónicos, que no son pocos, y eso que apenas somos conocidos al no podernos publicitar por no disponer de una sólo ayuda económica oficial, en contrate con las mil-millonarias cifras que cada año reciben las decenas de organismos y miles de oficinas de “ayuda” a la mujer.
Raro es el día que no recibimos llamadas desesperadas de hombres, o de sus hermanas, madres o actuales compañeras, contándonos casos de maltrato hacia dichos hombres por sus esposas o exesposas. Algunas veces el maltrato es hasta físico, pero en todas ellas –casi sin excepción- el maltrato es psicológico, a base quitarle dinero de las cuentas, esconderle documentos o pertenencias personales, de no permitirle ver a los hijos, de amenazarle con denunciar malos tratos inexistentes de él, tal como le han “bien-aconsejado” una abogada o amiga íntima, etc.
La mayoría de las llamadas son cuando ya la han interpuesto la referida denuncia falsa y, al hombre en cuestión, ya le ha atropellado la actual inquisición sacándolo de su casa en menos de tres horas esposado o a empujones de casa sin darle tiempo tan siquiera a coger su ropa y objetos personales. A veces hasta se ha pasado un par de días en el calabozo, y otras, hasta ha sido él quien ha llamado a la policía para pedir ayuda y, al llegar, con la sola denuncia ‘sobre la marcha’ de la “siempre-inocente-mujer”, es él quien ha sido detenido.
Además, y tal como ha denunciado repetidamente la valiente Decana de jueces de Barcelona, Dña. María Sanahuja, esta locura “de género” está llegando a afectar incluso a la adolescencia. Y así lo constatamos nosotros, pues no pocas veces las llamadas de atropello son referidas a varones jóvenes que han sido denunciados por la novieta o exnovieta de turno por el despecho al haberlas dejado el referido mozo. Muchas veces las falsas denuncias son de maltrato físico sin mostrar señal alguna o simplemente mostrando cualquier señal ínfima en una extremidad que bien se la pueden haber causado ellas mismas accidental o voluntariamente sin gran dolor.
Pero el colmo del retorcimiento y de la maldad es la de engatusar al chico una última vez; ya saben, el socorrido “necesito verte, aunque sólo sea una vez más para hablar”; y con tal excusa, le dan el calentón al chaval, se le llevan al catre o simplemente en el coche, y le denuncian de violación. En pocos días -cuando no horas- el ingenuo chico, sin verlo ni saberlo, es condenado por la vía del inquisitorial juicio-rápido impuesto por las hembristas y se tira parte de su preciosa juventud en la cárcel, sin poder tan siquiera beneficiarse de la redención de condenas ‘gracias’ a la alarma social que las sanguinarias hembristas crean artificialmente.
No crean Uds que exagero; ocurre exactamente así, y los juristas de este foro podrán refrendar lo que digo por aberrante que parezca.
Eso sí, luego, la reina de las ‘décimas’, su señoriísima la Montse Comas, apoltronada con gran boato que le otorga su juguete (1) del Observatorio de Violencia Doméstica (perteneciente al CGPJ) y una de las más beneficiadas de esta rentable “industria del maltrato”, sale cada poco en la tele o cualquier otro medio de ‘desinformación’ (sometido o comprado por la no despreciable cuenta de publicidad institucional hembrista) diciendo simplezas parecidas a “sólo una ‘décima’ parte de hombres son maltratados ya que las denuncias de hombres son sólo una ‘décima’ parte de la de mujeres”. Y también –siempre según ella- lo de “sólo una décima parte de las mujeres denuncian el maltrato ‘de género’ al que son sometidas”.
Y nosotros nos hacemos las siguientes preguntas:
¿Qué pasaría si, al igual que han hecho ellas con carteles en todas las comisarías, juzgados, etc, y diciendo machaconamente a través de todos los medios de radiodifusión y TV a la mujer que denuncie cualquier tipo de maltrato que recibieran de su pareja o expareja, no hacen lo mismo dirigiéndose también al hombre?
¿Por nos han rechazado la solicitud que dirigimos a ‘su’ CGPJ en la que pedíamos autorización para instalar nosotros los susodichos carteles, aún pagándolos con nuestro esfuerzo?
¿A qué pitonisa consultan para saber que sólo una décima parte de las mujeres denuncian los malos tratos?
¿No será que se basan en las repugnantes ‘macro-encuestas’ amañadas del Instituto de la Mujer (2) en las que sólo formulan a mujeres cuestiones que competen más bien al respeto o desamor que al maltrato en si; encuestas en las que usan el sesgo metodológico de no sólo NO preguntarle a sus parejas masculinas si reciben el mismo tipo de ‘malos tratos’ de ellas, sino tan siquiera preguntarle a ellas si no infligen los mismos malos tratos a sus hombres?
(Continua un poco más)
Raro es el día que no recibimos llamadas desesperadas de hombres, o de sus hermanas, madres o actuales compañeras, contándonos casos de maltrato hacia dichos hombres por sus esposas o exesposas. Algunas veces el maltrato es hasta físico, pero en todas ellas –casi sin excepción- el maltrato es psicológico, a base quitarle dinero de las cuentas, esconderle documentos o pertenencias personales, de no permitirle ver a los hijos, de amenazarle con denunciar malos tratos inexistentes de él, tal como le han “bien-aconsejado” una abogada o amiga íntima, etc.
La mayoría de las llamadas son cuando ya la han interpuesto la referida denuncia falsa y, al hombre en cuestión, ya le ha atropellado la actual inquisición sacándolo de su casa en menos de tres horas esposado o a empujones de casa sin darle tiempo tan siquiera a coger su ropa y objetos personales. A veces hasta se ha pasado un par de días en el calabozo, y otras, hasta ha sido él quien ha llamado a la policía para pedir ayuda y, al llegar, con la sola denuncia ‘sobre la marcha’ de la “siempre-inocente-mujer”, es él quien ha sido detenido.
Además, y tal como ha denunciado repetidamente la valiente Decana de jueces de Barcelona, Dña. María Sanahuja, esta locura “de género” está llegando a afectar incluso a la adolescencia. Y así lo constatamos nosotros, pues no pocas veces las llamadas de atropello son referidas a varones jóvenes que han sido denunciados por la novieta o exnovieta de turno por el despecho al haberlas dejado el referido mozo. Muchas veces las falsas denuncias son de maltrato físico sin mostrar señal alguna o simplemente mostrando cualquier señal ínfima en una extremidad que bien se la pueden haber causado ellas mismas accidental o voluntariamente sin gran dolor.
Pero el colmo del retorcimiento y de la maldad es la de engatusar al chico una última vez; ya saben, el socorrido “necesito verte, aunque sólo sea una vez más para hablar”; y con tal excusa, le dan el calentón al chaval, se le llevan al catre o simplemente en el coche, y le denuncian de violación. En pocos días -cuando no horas- el ingenuo chico, sin verlo ni saberlo, es condenado por la vía del inquisitorial juicio-rápido impuesto por las hembristas y se tira parte de su preciosa juventud en la cárcel, sin poder tan siquiera beneficiarse de la redención de condenas ‘gracias’ a la alarma social que las sanguinarias hembristas crean artificialmente.
No crean Uds que exagero; ocurre exactamente así, y los juristas de este foro podrán refrendar lo que digo por aberrante que parezca.
Eso sí, luego, la reina de las ‘décimas’, su señoriísima la Montse Comas, apoltronada con gran boato que le otorga su juguete (1) del Observatorio de Violencia Doméstica (perteneciente al CGPJ) y una de las más beneficiadas de esta rentable “industria del maltrato”, sale cada poco en la tele o cualquier otro medio de ‘desinformación’ (sometido o comprado por la no despreciable cuenta de publicidad institucional hembrista) diciendo simplezas parecidas a “sólo una ‘décima’ parte de hombres son maltratados ya que las denuncias de hombres son sólo una ‘décima’ parte de la de mujeres”. Y también –siempre según ella- lo de “sólo una décima parte de las mujeres denuncian el maltrato ‘de género’ al que son sometidas”.
Y nosotros nos hacemos las siguientes preguntas:
¿Qué pasaría si, al igual que han hecho ellas con carteles en todas las comisarías, juzgados, etc, y diciendo machaconamente a través de todos los medios de radiodifusión y TV a la mujer que denuncie cualquier tipo de maltrato que recibieran de su pareja o expareja, no hacen lo mismo dirigiéndose también al hombre?
¿Por nos han rechazado la solicitud que dirigimos a ‘su’ CGPJ en la que pedíamos autorización para instalar nosotros los susodichos carteles, aún pagándolos con nuestro esfuerzo?
¿A qué pitonisa consultan para saber que sólo una décima parte de las mujeres denuncian los malos tratos?
¿No será que se basan en las repugnantes ‘macro-encuestas’ amañadas del Instituto de la Mujer (2) en las que sólo formulan a mujeres cuestiones que competen más bien al respeto o desamor que al maltrato en si; encuestas en las que usan el sesgo metodológico de no sólo NO preguntarle a sus parejas masculinas si reciben el mismo tipo de ‘malos tratos’ de ellas, sino tan siquiera preguntarle a ellas si no infligen los mismos malos tratos a sus hombres?
(Continua un poco más)
NOTAS ARRIBA REFERIDAS:
(1) Nos referimos al Observatorio de Violencia Doméstica como “juguete” de Montserrat Comas porque en los Cursos de Verano de El Escorial, del pasado 2004, un juez de una muy alta institución española, al dirigirnos a él para que nos ayudasen desde dentro a combatir esta verdadera guerra de géneros, nos dijo literalmente, refiriéndose a tal Observatorio de Montse Comas, “a esta mujer le han dado el juguete del Observatorio y eso va a traernos graves consecuencias”.
(2) El instituto de la Mujer, más bien deberían denominarlo “Instituto contra el Hombre” ya que destinan muchos más fondos a criminalizar al varón que a defender propiamente a la mujer.
CONCLUSIÓN
Tanto si Ud cree en lo que aquí denunciamos, como si no termina de creerlo, le rogamos entre en la página web padresmaltratados.com y no deje de ver los informes científicos de maltrato de otros países de nuestro mismo entorno socio-cultural, así como los artículos de muchas mujeres justas que habiendo sido de las primeras nobles feministas, ahora, al ver cómo el feminismo se ha convertido en hembrismo, son las primeras en denunciar los atropellos que se están cometiendo contra el varón en general.
Gracias por su lectura,
Jesús Arapiles /Oficina del Defensor del Hombre y sus Hijos.
(1) Nos referimos al Observatorio de Violencia Doméstica como “juguete” de Montserrat Comas porque en los Cursos de Verano de El Escorial, del pasado 2004, un juez de una muy alta institución española, al dirigirnos a él para que nos ayudasen desde dentro a combatir esta verdadera guerra de géneros, nos dijo literalmente, refiriéndose a tal Observatorio de Montse Comas, “a esta mujer le han dado el juguete del Observatorio y eso va a traernos graves consecuencias”.
(2) El instituto de la Mujer, más bien deberían denominarlo “Instituto contra el Hombre” ya que destinan muchos más fondos a criminalizar al varón que a defender propiamente a la mujer.
CONCLUSIÓN
Tanto si Ud cree en lo que aquí denunciamos, como si no termina de creerlo, le rogamos entre en la página web padresmaltratados.com y no deje de ver los informes científicos de maltrato de otros países de nuestro mismo entorno socio-cultural, así como los artículos de muchas mujeres justas que habiendo sido de las primeras nobles feministas, ahora, al ver cómo el feminismo se ha convertido en hembrismo, son las primeras en denunciar los atropellos que se están cometiendo contra el varón en general.
Gracias por su lectura,
Jesús Arapiles /Oficina del Defensor del Hombre y sus Hijos.
