María Emilia Casas, funcionaria al servicio del pueblo
La presidenta del TC atiende a una abogada víctima de la discriminación de género... pero lo hace porque está al servicio de los ciudadanos, que sois unos malpensados.
La superexclusiva de ABC, rematada ahora por El País, en la que doña María Emilia Casas atiende solícita a una abogada que se presenta como víctima del machismo revela un nuevo modelo de funcionario progresista.
Yo lo que iba a dar es el teléfono de unas personas expertas en estas cosas, de la federación de mujeres y le voy a dar el nombre de dos personas que hacen defensa jurídica y que además hacen mucho apoyo no, por si...le interesan, no. (...) Eh, si alguna vez va en amparo, pues ya me vuelve a llamar, pero yo creo que estas son las personas indicadas. (...) Usted si quiere me vuelve a llamar por supuesto, pero que a través de esta vía, tenga alguna ayuda, eh, porque lo hacen muy bien. Son muy eficaces.
Algunos se escandalizan por que la presidenta de una de las más altas instituciones del Estado, de un tribunal desbordado por los recursos de amparo, encuentre tiempo para hablar con una abogada que luego es una asesina. Pero a mí me parece un ejemplo de lo que deben ser los funcionarios. Tú no puedes escolarizar en castellano a tu hijo en Barcelona o San Sebastián, pues llamas al consejerín de turno y él (o ella) te atiende. Te manda a tomar por saco, pero de viva voz. Qué gusto, ¿verdad?
Creo que se trata de un plan piloto en la Administración de Justicia introducio por Bermejo, el que ve el mundo en colores, pues no es éste el primer caso. Hace unos años, un magistrado de la Audiencia Nacional telefoneó por la noche a un narcotraficante para recordarle que debía comparecer en el tribunal. Éste escapó, pero desde luego eso no es culpa de los jueces, qué va.
A ver si así se erradican comportamientos como los que ocurrían hace años en Derecho de la Autónoma de Madrid. Allí algunos catedráticos mandaban a sus adjuntos a dar clase, porque ellos eran unos señores que habían sacado una oposición para no tener que levantarse a las ocho de la mañana o mezclarse con niños. Hubo uno que luego babeaba por dar clase al príncipe Felipe. Este "jurista de reconocido prestigio" (socialista, claro) también estuvo en el Tribunal Constitucional.
Doña María Emilia, ¿me puede dar su teléfono para que le consultemos un asunto de alquiler?
María Emilia Casas defiende en su despedida la sentencia sobre el Estatut de Catalunya
La ya expresidenta del Tribunal Constitucional María Emilia Casas ha acusado este miércoles a los políticos de saltarse la Constitución por no cumplir los plazos para renovar el alto tribunal. Casas se ha despedido del cargo con un discurso muy crítico durante el acto de toma de posesión de los cuatro nuevos jueces elegidos por el Senado tras tres años de parón.
Casas ha criticado que la designación de otros cuatro jueces por parte del Congreso de los Diputados se haya frenado "con un reparto de puestos sin atender a las cualidades de cada uno de los candidatos". También ha exigido a los parlamentarios "buscar hombres y mujeres cuya elevada cualificación técnica y cuyas prendas de honradez e independencia permitan mantener intangible el marco constitucional". Las negociaciones en el Congreso entre el PSOE y el PP para nombrar a los nuevos magistrados están bloqueadas por la exigencia de los populares de proponer como candidato a Enrique López, cuya candidatura ya fue rechazada por el Senado por falta de idoneidad.
En su duro discurso, la expresidenta del Constitucional también ha pedido cambios legales para ampliar el plazo de cuatro meses que fija la ley para que las Cortes renueven a los magistrados y ha asegurado que el retraso en la renovación de los jueces "perjudica la calidad de la democracia".
Crispación excesiva
Casas también ha señalado que los jueces del tribunal solo se mueven "por razones jurídicas" y ha defendido, entre otras, la sentencia sobre el Estatut de Catalunya. Así, ha recriminado las críticas realizadas a este fallo, sobretodo las de los cargos públicos. "El grado de crispación" que ha rodeado la sentencia "ha sido a todas luces excesivo", ha apuntado y ha planteado recuperar el recurso previo de constitucionalidad para resolver este tipo de cuestiones.
Los cuatro nuevos jueces del Constitucional, Francisco Hernando, Adela Asúa, Luis Ortega y Francisco Pérez de los Cobos, han tomado posesión de sus cargos tras este discurso. El presidente en funciones, Javier Delgado, convocará en los próximos días un pleno para elegir al nuevo presidente del tribunal, ya que entre los cuatro magistrados que abandonan el TC figura María Emilia Casas.
Al levantar la sesión del acto, Delgado ha respaldado las tesis de Casas y ha subrayado la anomalía de la situación que vive el Constitucional, que actualmente solo está integrado por 11 jueces a la espera de que el Congreso designe a los tres sustitutos de los jueces cuyo mandato acabó el pasado noviembre y al magistrado sustituto de Roberto García Calvo, fallecido hace más de dos años.