estoy en una situación muy mala y por mucho que piense no se me ocurre una solución. Espero que algun experto pueda ayudarme...
La situación:
Sufro una enfermedad muy invalidante con la que por desgracia es prácticamente imposible conseguir ayudas por discapacidad a menos que una esté postrada en la cama...
Esto hace que a penas pueda trabajar 1 o 2 h al día y dependiendo de qué se trate.
Cuando me despidieron de mi último trabajo me di cuenta que no podía volver a trabajar por cuenta ajena porque solo empeoro y termino por perder el trabajo, es insostenible.
Así que decidí crear mi propia empresa para poder ser más o menos productiva mediante mi talento creativo y trabajar a mi ritmo.
Para ello tuve que pedir 2 préstamos: uno de 15.000€ al banco y otro de 20.000€ a una fundación que ayuda a financiar a emprendedores en riesgo de exclusión.
Por desgracia mi salud solo hace que empeorar y ya me resulta del todo imposible pagar cada mes y lo termina pagando mi marido.
Tenemos que vivir en casa de sus padres porque todo hace un total de 200 400 265 de autónomos = 865€ al mes y por lo tanto no podemos pagar un triste alquiler.
No puedo soportar que mi marido siga pagándolo, la situación nos está costando la salud y mucho más y realmente no se me ocurre qué hacer a parte de declararme insolvente, lo que imagino quizás solo serviría para ganar algo de tiempo?
Cuales serían las consecuencias? tengo otras opciones para reducir el volumen de pagos mensuales? ya he hablado con las entidades que me prestan y por su parte no parece que haya más que puedan hacer.
Si, como deducimos, es usted autónoma, como ya sabrá, responderá por las obligaciones de pago que pueda contrae con todos sus bienes, de manera ilimitada (desconocemos si usted está casada con separación de bienes o en régimen de gananciales) .
La declaración de concurso paralizaría la ejecución de las deudas pendientes y la generación de intereses. Con la solicitud puede conseguir una reducción de la deuda hasta un 50% y un aplazamiento en el pago de hasta cinco años. Sin embargo, deberá afrontar unos costes que pueden oscilar entre el 10% y el 15% del total de la deuda para cubrir los gastos del procedimiento.
No obstante, creemos que debe ser el último recurso. Y sólo tras una negociación frustrada con los acreedores, proceder a estudiar dicha posibilidad.