Yo he sufrido malos tratos y me he sentido discriminado por una parte de la sociedad.
Sé lo que es una patada de mi pareja, sé lo que es un golpe de su puño cerrado en mi cuerpo, sé lo que son noches en vela intentando dormir en el sofá oyendo insultos, y sé lo que es recibir la prohibición de mi pareja de ver a mi hija en un proceso de separación.
Evidentemente, nunca he contestado ninguna agresión con otra, pero sí me vi obligado a abandonar mi hogar.
Mis problemas eran compartidos por mis amigos, pero todo pareció cambiar cuando, ya dictada la sentencia de separación, llegó la amenaza de muerte.
Por supuesto, presenté denuncia en comisaría, pero tuve que coger la baja laboral.
Tanto mi doctora de familia, como mi psicólogo y mi abogada me ayudaron enviándome a un centro de ayuda. Cuál fue mi sorpresa al ver que nadie quiso abrirme la puerta porque era un hombre, y sólo ayudaban a mujeres.
Yo sé que esto no cambiará nunca porque mis problemas siguen: mensajes en el móvil, llamadas con número oculto...
Si fuese una mujer,
¿tendría arreglada mi situación?
Mi más enérgico apoyo a todas esas mujeres maltratadas física y psicológicamente, pero me pregunto:
¿Tengo yo su apoyo?
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Palmones defiende a un hombre de su mujer, acusada de agredirle
Más de 50 vecinos vigilaban ayer la casa de Francisco Oliva para protegerle de su esposa, acusada de proferirle malos tratos
Más de 50 vecinos de Palmones hacían ayer guardia en la entrada de la vivienda de Francisco Oliva Amores, en la calle Almería, para protegerle de su esposa, que está acusada de proferirle malos tratos físicos y psicológicos.
Francisco, de 56 años y que trabaja como soldador para el Ayuntamiento de Los Barrios, contrajo matrimonio con Ana María S.N., de 46 años y natural del País Vasco, hace seis meses; después de mantener un breve noviazgo.
Desde el primer día de su matrimonio, según personas allegadas a él, Ana María se negó a dormir en su misma cama y a mantener relaciones sexuales. Fue entonces cuando empezaron los insultos y las vejaciones, decayendo poco a poco la dignidad de Francisco. La familia asegura que su mujer empezó entonces a apropiarse de todas sus pertenencias, tales como su nómina, su DNI, sus tarjetas de crédito, el libro de familia o la documentación de la vivienda de Palmones.
Las broncas en la casa o en plena calle empezaron a ser conocidas por los vecinos de la barriada, que incluso contemplaron cómo Ana María le agredía físicamente en el pub ”Coconut”. La situación llegó hasta tal punto que Francisco se negó a salir a la calle y empezó a faltar al trabajo, lo que alertó a sus familiares. Un sobrino suyo insistió en visitarle y su pareja le dijo que estaba enfermo. No obstante, consiguió entrar en su habitación y se encontró a su tío hundido, llorando en la cama. ”Lo he perdido todo, mi familia, mi trabajo”, dijo Francisco al ver a su familiar, que decidió entonces acudir a un abogado a sabiendas de la situación que estaba atravesando su pariente y que su pareja le estaba mintiendo para enfrentarlo a su familia. Francisco presentó el pasado 31 de marzo una denuncia ante la Guardia Civil de Los Barrios por presuntos malos tratos físicos y psicológicos.
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ABC/
CÓRDOBA. José Luis C.R., que ha sido denunciado por su ex compañera sentimental por un supuesto delito de amenazas y acoso, ha presentado ante el Ayuntamiento de Córdoba una reclamación para exigir que se cree un área del Hombre, igual que existe un departamento de Mujer, para no verse discriminado por razón de sexo.
José Luis C.R., que proclama su inocencia, explicó a Efe que tras la denuncia de su ex compañera se ha visto absolutamente desamparado» puesto que el «lógico rechazo social» ante el incremento de los casos de malos tratos y el mal uso que se puede hacer de la Ley Integral de Violencia de Genero, hacen que ya no exista presunción de inocencia para cualquiera al que denuncien por un hecho de este tipo.
En este sentido resaltó que ante los perjuicios que social y personalmente le puedan acarrear las acusaciones de su ex compañera hasta que en el juicio se vea que soy inocente, se personó en el Ayuntamiento cordobés para tratar de recibir algún tipo de asesoramiento como el que se presta a las mujeres víctimas de malos tratos.